Valdemorillo Despierta

  La designación digital de empleados/as del Ayuntamiento. Los ciudadanos no somos conscientes del hecho basal, que en los últimos años ha crecido   la hueste de los empleados municipales. Y de una manera muy especial durante  uno de los gobiernos pasados. Junto a los funcionarios por oposición, hay otros trabajadores nombrados a dedo, por razones personales o de clientelismo político, un grupo de empleados/as elegidos/as por  “designación digital”,  al que me quiero referir de manera especial. Creo que el empleo público municipal ,  han cambiado  en estos últimos años. Hay ejemplos de profesionales del Consistorio que atienden de forma  diligente, educada, rápida y  honesta . Pero hay otros que son negligentes, torpes y que nunca están cuando se los busca. Es posible, que al final el problema es de productividad, pueda ser similar a la de hace unos años, pero ahora, el número de empleados públicos (incluyendo los cargos de todos los niveles) aumento considerablemente y el Gobier

  La mentira encubre lo que está mal o  sin hacer. Existe una larga tradición del pensamiento político municipal que acepta que los políticos mientan a los ciudadanos. Por suerte, actualmente la desafección hacia la clase política se ha forjado desde la creencia de que, todos mienten y además con impunidad. Pero, afortunadamente cada vez hay más ciudadanos que no queremos ser engañados. T enemos desde hace años un nivel alto de desconfianza hacia la política en Valdemorillo que apunta en ese sentido por carencia de líderes. Hay  ineptos o irresponsables. Algunos están demasiado interesados en su “ negocio particular ”. Otros combinan todos estos defectos. Pero también asumimos un problema de votantes responsables que sepan lo que votan y a quién votan. Por eso, nuestro pueblo está siendo sacudido por los votos de muchos ciudadanos desinformados con una ingenuidad solo superada por la irresponsabilidad que votan siglas sin tener en cuenta quien encabeza esas siglas, su experiencia y

  La indecencia corrompe al político pervirtiendo al pueblo, y los electores somos culpables Estamos a pocos meses de unas nuevas elecciones municipales y por eso quiero proclamar y seguiré haciéndolo: que los ciudadanos seamos engañados una vez, es fácil. ¿Pero dos? ¿Y tres? ¿Y cuatro?... La política no puede coexistir tanto tiempo con la mentira, con la falsedad. Me sorprende que, estando al corriente de la indecencia, sigamos  votándoles . “Corrompe al político y pervierte al pueblo”. Afirmar, que tenemos los políticos que nos merecemos, es descorazonador. Poseemos suficientes problemas como para encima asumir podredura en nuestros políticos locales. La colecta de escándalos parece habernos colocado cerca del umbral de lo soportable. Nos desayunamos con nuevos detalles en torno a nuevos chanchullos que nos acompañan desde hace tiempo, y puede darse por seguro que sólo cabe esperar el siguiente fraude. En los pasados comicios locales, el panorama no cambió. Alguna candidata

  LAS ENTIDADES URBANíSTICAS DE CONSERVACIÓN NO SON PARA SIEMPRE El interés que tienen las urbanizaciones por mantenerse al margen de la gestión municipal, hay que encontrarlo en la escasa fiabilidad de los diferentes gobiernos que pasaron por el Ayuntamiento durante medio siglo, por su estructura  "caciquil". Los vecinos no se fían de los políticos municipales. Los propietarios de las urbanizaciones consideran que: depender en el mantenimiento urbanístico del Ayuntamiento es mucho peor. Pero ahora, la población mayoritaria de Valdemorillo, se encuentra en de estas urbanizaciones con una población joven y cada vez más consciente de la injusticia que supone, no recibir compensación de sus impuestos municipales. Tal vez por eso, las Entidades Urbanísticas de Conservación, continúan existiendo, después de medio siglo de existencia.  Las Entidades Urbanísticas de Conservación  Son entes de derecho público formadas por los propietarios, con personalidad y capacidad jurídica

  Forma p arte de la opinión pública, y sus actuaciones expuestas a juicio. También los que hacemos de cronistas, “pero gratis”, debemos asumir, de buen grado, cualquier crítica. Y si el político, es “poco político”, de perder el respaldo del gubernamental y acortando su espacio informativo. Los reconocimientos se dan a personas que destacan, pero sólo una pequeña parte siente suyo esos triunfos. Mucha más gente se emociona con un cantante famoso, que con un político. Todos perciben que pudo haber sido alguien de su familia el exitoso, pues todos hemos practicado, aunque sea a solas, algunas actividades políticas, artísticas o deportivas. Cualquier ciudadano o ciudadana  de Valdemorillo, que decide asumir una responsabilidad política pasa, quiera o no, a formar parte de las personas expuestas a la opinión pública  del pueblo y sus actuaciones están exhibidas a la crítica. Por tal razón las personas que deciden cobrar todos los meses de nuestro dinero, debe pagar ese peaje y les in

Incompetencia, es  un término que indica ineficacia y tiene varias acepciones. Cuanto menos sabemos, más creemos saber. Es un sesgo cognitivo según el cual, las personas con menos habilidades, capacidades y conocimientos tienden a sobrestimar esas mismas habilidad, capacidades y conocimientos. Como resultado, suelen convertirse en gente que opina sobre todo lo que escucha sin tener idea, pero pensando que sabe mucho más que los demás. I ncompetencia es un término que indica ineficacia y tiene varias acepciones. La social indica que no tiene la capacidad o las competencias necesarias para resolver o funcionar de manera eficiente. La expresión también es usada en economía para indicar la incapacidad de sostenerse de manera eficaz en el mercado. Las empresas, tienen que elegir a los mejores. Potenciar la economía empresarial es tener buenos estrategas. Pero, en política, cuando se necesitan los mejores para salir de una crisis, elegimos a los peores, a los que no tienen preparación ni m

  ¿Son alcalde y concejales los responsables?  ¿Nadie más tiene responsabilidad en esta pésima  gestión municipal? Desde hace tiempo opinamos que: muchos políticos son un  problema. Son incapaces de asumir su parte de responsabilidad en la gestión municipal.  Lo ocurrido, en el pleno del jueves 20 de octubre, pone de manifiesto que estamos eligiendo a políticos inhábiles para gobernar en positivo y para todos.   Desprestigiando a la clase política, será difícil dedicarse a la gestión de lo público. Un porcentaje muy elevado de ciudadanos, situamos en las encuestas del CIS, a la clase política como un inconveniente  en la gestión de lo público. El último barómetro lo vuelve a reflejar:  un 29% de los entrevistados declaran que la clase política sigue siendo motivo de preocupación. Lo ocurrido, en el Pleno del jueves 20 de octubre Nos pone de manifiesto que en este pueblo estamos eligiendo a políticos incapaces de gobernar "en positivo"  para todos , haciendo uso del cons

Instaurado hace años en Valdemorillo. Este tema lo he podido tratar con ciudadanos concienciados de la realidad política que llevamos arrastrando. Muy pocos políticos municipales son capaces de ofrecer una visión algo ilusionante para superar el lastre arrastrado por gobiernos interesados en provechos, y materializados en hechos, durante demasiados años de vida democrática. La Restauración borbónica, nos permitió descubrir complejas relaciones entre el poder político y las “ clientelas locales ”. Hoy la alternancia se sigue nutriéndose con caciques basados en el patronazgo que favorecen, desde posiciones de poder, a algunos vecinos para garantizarse su apoyo y fidelidad. Sin embargo, a pesar de haber pasado a un nuevo estatus político. Todavía, en este pueblo, sigue existiendo Caciquismo Clientelar como eje central del sistema político.  Con Franco, algunos oligarcas locales crecieron como caciques omnímodos, y muchos de ellos se hicieron ricos.  Algún partido de la derecha de este p

Lo único que buscan, del poder político, es su beneficio personal. Frecuentemente algún político, de cualquier ideología, usa el consolidado recurso retórico de  Groucho Marx:  " Si no te gustan mis principios, tengo otros ", para hacer valer tus “no argumentos”, modifica un adverbio de negación que contrasta la hipocresía ajena y la firmeza propia. El significante "principios" no ha dejado de tener cabida, incluso en el peor de los escenarios. Todas las formaciones saben que la alusión a las convicciones es un punto de anclaje con los votantes, que se sienten seguros sabiendo que las decisiones de sus mandatarios son previsibles y, por ende, generan una confianza bilateral entre aquellos que gestionan y aquellos que les votan para que sigan haciéndolo. Les da lo mismo un partido que otro para seguir en el poder. Pero que ocurre con los políticos sin principios que pueden militar en cualquier grupo político siempre guiados por el propio interés y salvagu