NECESITAMOS POLÍTICOS QUE, ADEMÁS DE COMPETENTES, SEAN HONESTOS
Hay muchas maneras de despilfarro. Algunas escandalosamente visibles y otras pasan desapercibidas. Para empezar, hay que considerar que el Ayuntamiento no es sólo la Sra. Alcaldesa y unos cuantos concejales, el Ayuntamiento somos todos. A unos no les importa lo que se hace con su dinero y a otros sí. La anterior alcaldesa permaneció con un poder absoluto durante 20 años, dentro en un contexto histórico de irregularidades contables que puso ante la justicia a cientos de alcaldes. Se necesita encontrar una explicación a los gastos innecesarios para analizarlos con la documentación necesaria: ¿Cómo y cuánto se pagó por las partidas derivadas de la ejecución material de la Plaza de Toros?. Nadie me negará que la honestidad que se requiere en los políticos no sea solo la que se refiere a la lucha contra la corrupción. Esta, desde luego, es fundamental y si se consiguiera generalizar habríamos dado un paso de gigante. Pero hay otros vicios en el funcionamiento de nuestro ayuntamient...