¿Cuándo son las próximas elecciones municipales?

 

Se celebrarán el 28 de mayo

Cuatro años después de las anteriores (que fueron el 26 de mayo de 2019).

Un informe, elaborado por la Universidad, a partir de una muestra de casi 5000 encuestados, ofrece unas conclusiones deprimentes. Los votantes elegimos cerrar los ojos ante las prácticas corruptas de algunos políticos, cuando afectan a nuestras preferencias, y por ello les seguimos votando.

Esto ocurre tanto entre los electores que sienten antipatía a informarse de los casos de corrupción cuando afectan a sus intereses, como entre los que tienen un mayor conocimiento y provecho por la política y prefieren estar informados sobre este tema. Por otra parte, un determinado sector de población dirige su voto no por ideología, si no por el interés de obtener un beneficio.

Sin embargo, seguimos viendo la corrupción y las mentiras como uno de los grandes problemas. Pero, parece que la aparente indignación no va acompañada de una rendición de cuentas en las urnas. Éstas son las razones por las que a algunos políticos los escándalos les salen gratis. Por esa razón, resulta anecdótico que en un pueblo como en el que vivimos, en donde la posibilidad de tomar referencia de los políticos resulta sencilla, sin embargo, a la hora de votar aparece otro tipo de intereses que permiten mantenerse en el poder a personas de dudosa honestidad.

Ante la nueva convocatoria a las urnas dentro de poco, vamos todos a procurar que castiguemos a todos aquellos que nos engañan. Porque la acumulación de escándalos políticos y económicos parece habernos colocado cerca de lo soportable.

A poco que prestemos atención a los medios informativos, amanecemos cada día con un nuevo caso de corrupción o con nuevos detalles en torno a las tramas que nos acompañan desde hace ya tiempo: Bárcenas, Gürtel, ERE, Palau, Pallerols, Brugal, Pretoria, ITV, Palma Arena, Over, Marketing, Malaya, PGOU, Pokemon, Noós.... la lista parece interminable, y puede darse por seguro que sólo cabe esperar al siguiente escándalo. También deberemos esperar las explicaciones del Alcalde al asunto de las entradas de los toros ante las fiestas de San Blas

¿Por qué no se castiga electoralmente la corrupción y las mentiras?

Hay que seguir denunciando cualquier corrupción, porque no tiene color, es una forma de violencia que corroe el contrato social entre ciudadanos y es uno de los principales problemas. La corrupción afecta de manera directa al funcionamiento de las instituciones políticas. La abundancia de ilegalidades acaba con la igualdad entre los ciudadanos, erosiona la eficacia del Gobierno y el deterioro de su legitimidad

Provoca eso que llamamos desafección, un distanciamiento casi insalvable entre la ciudadanía y los políticos que pone en peligro la cohesión comunitaria y desemboca en un escepticismo, obstáculo para el progreso del sistema representativo.

1. Hay que taponar los circuitos irregulares por los cuales se financian los partidos, fortalecer los mecanismos de control sobre   el Ayuntamiento, y arrebatar a estos la capacidad para recalificar terrenos y disparar su valor de un día para otro. Léanse con detenimiento el último PGOU, con toda la problemática generada sin solucionar aún.
2. La falta generalizada de ética pública en los municipios es una de las razones principales del despilfarro de gasto público, el favoritismo en la selección de personal, en la contratación de obras y servicios, … es esta ausencia de moral en el desempeño del cargo (que no tiene por qué reproducirse en el ámbito privado) la que representa el desprecio hacia el interés general para convertirlo en beneficio particular, propio o de los allegados.
3. El transfuguismo, cuando una persona de un grupo político determinado, voluntariamente se cambia a otro grupo con el fin de alterar la composición política de la corporación municipal o modificar la identidad en siglas del Gobierno del municipio. Existe una vinculación con la ética del primero de los apartados, ya que no cambia de partido sin consecuencias, sino que lo hace en un momento estratégico para lograr algo concreto, modificando las ambiciones primarias de la persona que no solo falla a su electorado, sino también a su partido. Normalmente esto se realiza a cambio de un futuro político, de una dirección de áreas municipales, de la gestión del urbanismo entre otras, que habitualmente desemboca en la corrupción. A pesar de todo y de las numerables críticas que se pueden recibir, no hay más reproche que el ético.
   

En la financiación de los partidos, en los gastos y contrataciones de las Administraciones Locales y en sus competencias urbanísticas, pervertidas. Y no solo entre los corruptos, sino también entre los corruptores que les rodean, por esa razón varios centenares de políticos están  imputados por su presunta implicación en casos de corrupción. Y subiendo. La capacidad de asombro de la ciudadanía parece permanentemente puesta a prueba, y lo normal sería que los diques de contención de la indignación social se hubieran roto ya. Sin embargo, en los últimos años ha cundido la impresión de que la corrupción parece salirle gratis al político, que las investigaciones e incluso imputaciones no se sufraga en las urnas con la dureza esperable. En menos de una década, un total de 676 municipios españoles se vieron afectados por diferentes casos de corrupción.

Tenemos a nuestro entorno un muestrario de casos, espero que mis lectores irán analizando para bien de la elección de candidatos.