De mi entrevista con Pilar López Partida

 

Conocer nuestros derechos y obligaciones para cumplir con nuestro compromiso social.

Parafraseando al cineasta sueco Ingmar Bergman, “esta etapa de la vida, es como escalar una gran montaña: mientras se sube las fuerzas disminuyen, pero la mirada es más libre, la vista más amplia y serena”. Ahora dispongo de muchos más datos, afronto la vida sin complejos y soy capaz de discernir mejor mis derechos, también mis obligaciones para con una sociedad que nos envuelve.

Debo cumplir con las reglas del juego que me marca una sociedad civilizada, también puedo exigir, reclamar mis derechos ciudadanos que me permiten las leyes para dirigirme a mis gobernantes locales, para conocer de primera mano lo que están haciendo con mis impuestos. Lo hago desde el convencimiento que constituye un derecho ciudadano que deberia estar más extendido en nuestro entorno social.

Pues bien, haciendo uso de ese derecho que me otorga la Constitución y la Ley de Transparencia, tuve una reunión de 60 minutos con la antigua alcaldesa Pilar López Partida, ahora nueva concejala del actual gobierno municipal. La reunión se celebró en su despacho, con la puerta abierta y el concejal de su partido, el Sr. Bravo, en el mismo aposento. Los temas tratados, son y eran de dominio público y expresados reiteradamente en mis escritos, que tienen que ver con la gestión “oculta” de la Sra. López, durante cuatro lustros. No tuve reparo alguno en comunicar a la nueva edil, que el interés con hablar con ella se fundamentaba en la disconformidad de una parte significativa de la población con su presencia en el gobierno, solicitándola que dimitiera.

Como, no podría ser de otra manera, el debate discurrió en perfecta armonía, a pesar que en varias ocasiones tuve que intervenir para que Dña. Pilar me dejara hablar. Yo animo a la ciudadanía preocupada por algún tema municipal, que exija participación y aclaración al político, sin pudor y con respeto, ya que esta diligencia forma parte de su obligación como personaje público.

La condición de ciudadano o ciudadana nos disponer de unos derechos, fundamentalmente sí hemos cumplido con nuestros deberes. Es importante que, junto a la formación de una identidad ciudadana, dispongamos de herramientas que nos permitan el ejercicio de nuestros derechos. Así podremos conseguir nuestra implicación en la vida ciudadana.

Es fundamental que percibamos como cercana y flexible la posibilidad de contactar con los munícipes. Es decir, la implicación en la vida de la comunidad es un derecho ciudadano que ha de posibilitarse desde la institución local.

Los políticos municipales, tienen actualmente sobre su mesa de trabajo unas promesas todavía incumplidas, que forman parte del ideario de gobierno. Entre ellos se encuentra: la necesidad urgente de encontrar soluciones a la Recepción de Urbanizaciones, que en la actualidad se deberían haber materializado parcialmente y con independencia de decretos municipales y otras patrañas que no hacen más que distraer un fondo marcado desde hace años por la Ley.

Pilar López Parida coincidía conmigo que la gestión debe hacerse incorporando en el impuesto la cuota de las urbanizaciones que deben derogarse en el tiempo, y que desde el primer momento las recepcionadas, se incorporarían al pueblo disponiendo de las mismas prerrogativas que cualquier zona del casco urbano de Valdemorillo.

Tenemos que ser conscientes que en la relación entre el ciudadano y el Ayuntamiento se podrían considerar cuatro dimensiones, que se corresponden con los cuatro subsistemas que se pueden reconocer en una sociedad, y son esenciales para su existencia: La dimensión política a través del conocimiento y la promoción de actitudes democráticas y participativas. La social tiene que ver con nuestro comportamiento en el pueblo, que exige cierto grado de lealtad y solidaridad. La cultural a través del patrimonio histórico y finalmente los conocimientos económicos (para el trabajo y otras actividades financieras) y la formación profesional desempeñan un papel clave para que se desarrolle esta dimensión.

Para trasmitir esta información al ciudadano, preocupado por la marcha de su pueblo, debe habilitarse medios informáticos suficientes que nos permitan estar informados de todas las gestiones que el gobierno municipal acomete, ya que de esta manera la ciudadanía podrá entender, en su verdadera dimensión, los debates de los Plenos Municipales y percatarse mejor del trabajo de nuestros representantes