Las elecciones municipales del año próximo

Los partidos políticos han dejado de representar a los ciudadanos.

Su distanciamiento y falta de credibilidad es algo tan preocupante como urgente de resolver, y el actual efecto de mentiras y corrupción propicia la desconfianza y la indignación, agrandando el divorcio con la sociedad.

Muchos ciudadanos se sienten secuestrados en sus derechos.  La partidocracia limita sustantivamente el ejercicio real de la democracia, y los ciudadanos no tienen margen para decidir. Se hace necesario, un mayor equilibrio de poder entre los partidos políticos y la sociedad.

Pero esta situación que se hace más patente por los medios de comunicación a nivel del estado o autonómico, también hace su aparición a nivel local en donde hay muchos puntos oscuros que nadie intenta aclarar y que se dejan a merced del tiempo para poder encontrar luz suficiente para su aclaración o alguien decide tirar de la manta.

A los partidos políticos en el poder no les interesa hurgar en el pasado para conseguir esclarecer todo lo que precisa. Según el CIS la corrupción es el segundo motivo de preocupación de los españoles, y los políticos y los partidos alcanzan asimismo una destacada cuarta posición, y con una clara tendencia al alza. Por otra parte, en el último Índice de Percepción de la Corrupción publicado por Transparencia Internacional, España ha sido el segundo país del mundo que más ha empeorado en su valoración relativa a la corrupción.

Los partidos políticos locales de Valdemorillo, tampoco pueden ignorar el rechazo de los ciudadanos han de ser activos y contundentes exigiendo urgentemente actuaciones claras e inequívocas por la transparencia y contra la corrupción. Los ciudadanos no estamos solos, nos acompañan los jueces y los medios independientes cada vez más activos e incisivos contra los corruptos. Quienes, por el contrario, se han quedado solos son los partidos políticos, y algo van a tener que hacer de forma urgente para salir del atolladero.

Ahora en el horizonte se asoma las elecciones municipales del año próximo y yo particularmente quiero ofrecer un semblante sociológico de como encuentro a los políticos frente a la credibilidad y otros temas que ensombrece la gestión municipal desde hace tiempo. Y aunque no dudamos en principio de la honradez individual de la mayoría de los políticos municipales, es evidente que algo falla en el funcionamiento de los partidos.

La TRANSPARENCIA es obligatoria ha de aparecer urgentemente, se deben publicar bien las cuentas, las de verdad, y declarar que no hay investigados por sospecha de ningún tipo de corrupción. Todavía no se ha llegado a un pacto tácito contra los chanchullos de cualquier tipo, evitando que el ciudadano tenga dudas o acuda con la denuncia al juzgado correspondiente y sin todas las pruebas que deberían existir. El ciudadano tiene el derecho y la obligación de conocer cómo se gestiona el municipio, que acontece en el entorno de la Plaza de Toros, porque se permitió la construcción en Fuentevieja, como se han concedido licencias parciales de una obra paralizada por orden gubernativa…etc. El político debe estar dispuesto a referir que hizo con nuestro dinero cuando aparecen indicios de mala gestión.  

Dado que los partidos no han sido capaces de llegar a un pacto o compromiso colectivo, es el momento de que los ciudadanos les exijamos a ellos este adeudo con la sociedad, y que controlemos si lo cumplen a través de nuestro voto en las elecciones, que es de las pocos instrumentos, por no decir el único, que tenemos para influir sobre los partidos.

En las próximas elecciones municipales, antes de depositar el voto, deberíamos exigir y valorar la actuación y el compromiso de cambio. Los primeros criterios de transparencia que se indican deberían cumplirse por los partidos ya en el momento de concurrir a las elecciones. Los segundos criterios deberían incluirlos, al menos, como compromisos contra la corrupción en sus respectivos programas electorales.

La  presidencia del PP de Valdemorillo, un partido a nivel autonómico demasiado baqueteado por los escándalos de corrupción, debería abandonar el puesto y dejar paso a otra persona. Así lo consideran una parte de sus votantes. Ningún miembro  del partido se atreve a plantearlo en público, pero ha dejado de ser un tema tabú. La presidenta dejo atrás de sí algunos asuntos oscuros no aclarados. Es una mujer con capacidad política pero con una trayectoria difusa. El PP es un partido consolidado en Valdemorillo que necesitaría un cambio en los personalismos, con gente más joven.

Los Progresistas de Valdemorillo, tuvieron en su mano la ocasión de modificar muchas cosas para el bien del pueblo, dieron algún paso en falso que está en litigio judicial y puede suponer que el partido local con algún otro quede difuminado en las próximas elecciones municipales. Han cometido errores importantes que han transcendido a la opinión pública.

Ciudadanos es un partido joven con ingredientes liberales y socialdemócratas, ni se parece a lo que será, precisamente porque responde al comportamiento de un partido mutante, en permanente estado de construcción, volátil, expuesto a la arbitrariedad de las coyunturas, pero también beneficiado por ellas. Para mí en Valdemorillo constituye una incógnita pero lo que todo el mundo debe tener presente es que se llevara los votos tanto del PP como del PSOE o Progresistas. Puede ser el partido más votado en Valdemorillo si no mete mucho la pata en lo que queda de legislatura y adopta mayor protagonismo como oposición.

Si Se Puede, Podemos: representar a la izquierda sociológica, en Valdemorillo no supo aprovechar mejor el tiempo que permaneció coaligado al gobierno. Por su bisoñez  política fue expulsado cuando descubrió la primera irregularidad y no supo esperar el mejor momento para denunciarla. Tendría que haber actuado con más profesionalidad y escoger mejor momento para trasmitirla a la ciudadanía. En la actualidad, todavía con cierta improvisación, es una fuerza que está trabajando la oposición y deberia tener más votos de los jóvenes en la próxima convocatoria.

El PSOE Valdemorillo, sigue siendo un partido todavía gris, que participa poco en la oposición y que sigue sufriendo la pérdida de identidad de convocatorias anteriores.