Carta abierta a la concejala Dña. Charo Cámara

Muchos municipios están haciendo un censo con el ADN de los perros.

Para recoger las “muestras” de la calle y analizarlas, con el fin de localizar a los dueños e imponerles una multa. Las nuevas tecnologías están permitiendo realizar la prueba ADN por test a costo cero. Estos ayuntamientos están creando una base de datos de perros con el fin de localizar y multar a sus propietarios incívicos

Dña. Charo, como usted bien sabe: A pesar de que la mayoría de los ciudadanos tiene una conducta cívica. He detectado un aumento del número de excrementos de mascotas abandonados en la vía pública, fundamentalmente en las urbanizaciones. Teniendo en cuenta que hay demasiados animales domésticos, este hecho se ha convertido en un desagrado para los vecinos que pasean y ya se ha trasformado en un asqueroso problema que hay que erradicar con urgencia.

El ayuntamiento deberia colocar mensajes visibles para todos los vecinos en  dependencias municipales, y comercios, vinilos en los vehículos municipales de limpieza, mensajes de WhatsApp y acciones de concienciación dirigidas tanto a todos. Colocación, en los carteles de las calles más "castigadas" por los excrementos de animales domésticos.

Para resolver definitivamente este problema de falta de sensibilidad que sigue generando que los propietarios de perros que no recojan las heces de sus mascotas. Hay bastantes ayuntamientos que están implantando sistemas efectivos sin apenas coste real. Parece que el Ayuntamiento de Valdemorillo todavía no ha iniciado acciones serias.

Las campañas de concienciación ya no son suficientes para poner remedio a uno de los principales motivos de queja de muchos vecinos. Por ello muchos municipios están haciendo un censo con el ADN de los canes para recoger las muestras de la calle y analizarlas, con el fin de localizar a los dueños e imponerles una multa.

Las nuevas tecnologías están permitiendo realizar una prueba de ADN se hayan convertido en algo más cotidiano que ha permitido reducir el coste de 200 a 35 euros por test. Estos ayuntamientos se están acogiendo para crear una base de datos de ADN de perros con el fin de localizar y multar a los propietarios incívicos a través de las heces de sus animales.

Aunque el perro no esté censado y no se pueda identificar a su dueño, una muestra de excremento recogida en la calle, permite hacer un retrato robot del perro  que incluye color, talla raza. Para que la policía pueda perseguir al dueño insolidario.

El proyecto consiste en modificar las ordenanzas municipales para que, además de obligar a censar los perros y colocarles un chip de identificación, sus propietarios también los sometan a un análisis de sangre que sirva para hacer una base de datos.

La recogida y custodia de las muestras de las heces callejeras, se efectuaría por parte de un funcionario municipal y el análisis posterior en el banco de ADN gestionado por una EMPRESA AUTORIZADA que servirá para conocer si el perro está censado o no. El costo de esta empresa se sufragará con las sanciones a los ciudadanos que de manera insolidaria permiten que sus mascotas depositen sus cacas en la vía pública. “El objetivo es que la base de datos sea lo más amplia posible.

Hay que de una campaña de concienciación ciudadana en Valdemorillo para permitir confeccionar una base de datos. El coste del análisis de sangre irá a cargo del ayuntamiento. La prueba será obligatoria e irá a cargo de todos los propietarios cuando se dé por finalizada la campaña de promoción, que durariá unos tres meses.