AYER SE CELEBRÓ UN PLENO EXTRAORDINARIO PARA RECAUDAR IMPUESTOS POR LAS PODAS

¡Las urbanizaciones siguen siendo “hucha de recaudación” de este gobierno municipal!

Sr Alcalde, gobernar no es solo imponer tasas; es también escuchar, planificar y ofrecer soluciones reales. En este caso, lo único que ha quedado en evidencia es la incapacidad de esta administración para cumplir con estas responsabilidades básicas, dejando a los ciudadanos de las urbanizaciones con la sensación de que, una vez más, somos los que debemos pagar los platos rotos de una gestión incompetente. VOX, Se hace a todo, incluso a incumplir sus promesas electorales.

La gestión municipal en materia de residuos en Valdemorillo deja mucho que desear y es un claro ejemplo de cómo una improvisada y mala administración puede perjudicar gravemente a sus ciudadanos, en este caso, de manera especialmente dura a los residentes de las urbanizaciones. Lo que debería ser una política diseñada para fomentar la sostenibilidad, la justicia tributaria y la eficiencia, se ha transformado en una carga desproporcionada que recae sobre los hombros de quienes ya enfrentan desafíos particulares al vivir en ellas.

La reciente imposición de nuevos impuestos relacionados con la gestión de residuos es una muestra clara de la desconexión entre el equipo de gobierno y la realidad. Estos impuestos no solo carecen de una distribución equitativa, sino que además se han implementado sin una mínima transparencia. Los ciudadanos desconocemos cómo se utilizarán estos recursos, qué beneficios concretos se derivarán de esta recaudación y, lo más importante, cómo se planea solucionar los problemas actuales. Esta opacidad no solo es preocupante, sino que también genera una sensación de desamparo y desconfianza hacia esta administración fundamentada en la constante improvisación.

En las urbanizaciones, donde abundan los espacios verdes, la gestión de estos desechos es un desafío constante. Sin embargo, en lugar de ofrecer soluciones prácticas y sostenibles, como programas de recogida específicos, áreas de compostaje comunitario o incentivos para la reutilización, la administración se limita a ignorar el problema. Esta inacción no solo supone una carga extra para los vecinos, quienes deben buscar soluciones por su cuenta, contradiciendo los principios básicos de sostenibilidad y economía circular.


El Real Decreto 1055/2022, que promueve la economía circular y la sostenibilidad en línea con los objetivos de la Unión Europea, debería ser una oportunidad para impulsar políticas responsables. Sin embargo, parece que en Valdemorillo esta normativa ha sido entendida únicamente como una excusa para aumentar la carga fiscal, sin ningún esfuerzo real por adaptar su espíritu a las necesidades. En lugar de fomentar proyectos que mejoren la gestión de residuos, reduzcan el impacto ambiental y generen empleo en sectores como el reciclaje o la reutilización, el equipo de gobierno se limita a imponer tasas, dejando a los ciudadanos con la impresión de que lo único que importa es recaudar.

¿Por qué no se han realizado consultas para conocer las necesidades reales de los residentes? para buscar soluciones conjuntas? Esta ausencia de comunicación refleja una preocupante falta de interés por parte del equipo de gobierno en colaborar con quienes se ven directamente afectados por sus decisiones. Sin embargo, parece que ni siquiera se ha considerado esta posibilidad, dejando claro que no existe una visión integral ni a largo plazo en esta materia.

 

 

Comentarios

  1. El alcalde Villena ha enviado una carta en la que explica de manera no del todo honesta la situación con respecto a la tasa de basuras de recogida de residuos de poda y el aumento del impuesto mas menos de un 60%. Viene a decir que la culpa es del gobierno. Para empezar, si todo es culpa del gobierno como dice en la carta, él es solo un mandado. Un mandado que cobra una pasta, unos 50.000 al año por ejercer de mandado? No me lo creo. El alcalde Villena no carece de responsabilidad. En primer lugar recaudar con el impuesto de basura el coste real del servicio de recogida es un mandato de la Comisión Europea y se dio un plazo de dos años par su implementación. Nadie obliga al alcalde Villena el modo en el que realizar la tributación. Nadie le obliga a poner una tasa injusta que carece de toda equidad ni le obliga tampoco a concertar con una empresa privada la recogida durante 20 años, un plazo muy superior a un mandato cuatrienal, ni a responsabilizar al ayuntamiento de los medios mecánicos y materiales de la recogida pero no de contratación del personal.
    En cuanto a Vox que decir. Si les dijeron a sus votantes que iban a acabar con los chiringuitos y que no les subirían los impuestos, pues parece que les mintieron.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Iván, muchos vimos en VOX el partido nuevo en Valdemorillo, ese “aire fresco” que prometía cambiar el ritmo político de un pueblo que lleva más de medio siglo en manos de las mismas familias de siempre. Sí, esas de “toda la vida”, las que no solo reparten el pastel político como si fuera un legado genético. ¡Qué panorama! Pero, mira tú por dónde, pensé que igual esta vez la cosa cambiaba. Aunque VOX y yo estemos a años luz ideológicamente, algo en su discurso me hizo creer que podían ser ese catalizador necesario para mover las piezas de este tablero anquilosado. Iluso de mí, claro.

      Porque, ¿qué pasó en cuanto tocaron poder? Pues lo de siempre, pero con bandera nueva. Las promesas volaron más rápido que una caña gratis en las fiestas de San Blas. Ese “Venimos a transformar”, ese “Acabaremos con las familias de siempre”, y ese “El PSOE recuperará su brújula” resultaron ser simplemente frases de campaña, del tipo que se escribe con 72 para que se vea bien grande en los carteles, pero que en realidad no significan nada. ¡Pura literatura barata!

      En cuanto se vieron con mando en plaza, zas, se arrancaron la máscara como en una película mala de espías, y ahí estaba: el mismo politiqueo de siempre, maquillado con discurso patriótico. Y lo peor no es eso, no. Lo peor es que consiguieron votos responsables, de esos que depositan su confianza pensando que están marcando algo diferente. Pero también les cayó, como regalo del cielo, el voto cabreado con la izquierda. Ese voto que no se piensa tanto y que va más con el corazón enfurecido que con la cabeza fría. Les llovió como si hubieran abierto el paraguas en pleno monzón.

      El resultado ha sido el de siempre: un pueblo exactamente igual, donde las cosas no cambian, pero el eslogan de turno sí. Ahora los votantes nos encontramos con esa sensación de deja ya, preguntándonos si somos personajes secundarios en la enésima mala telenovela política o si Valdemorillo está condenado a protagonizar infinitas secuelas de El día de la marmota. Porque, al final, lo único que cambia son las caras que saludan desde el balcón del ayuntamiento el día de las fiestas, mientras el resto seguimos aquí, viendo cómo el “aire fresco” se convierte en el mismo olor rancio de siempre.


      Eliminar
  2. ¡Qué sorpresa! Prometieron los de VOX a bombo y platillo que iban a eliminar las tasas de basura, y resulta que no solo no las eliminan, ¡sino que ahora contribuyen a subirlas! Es casi como si esas grandes promesas de campaña fueran simples adornos para ganar votos, y una vez que se sientan en el sillón, todo eso se esfuma como humo al viento. Parece que el poder tiene la misteriosa capacidad de hacer olvidar a algunos políticos de dónde vienen y qué dijeron para llegar allí.
    Lo peor es la sensación de que se ríen en tu cara, como si pensaran: "Bueno, ya les convencimos con unas frases bonitas, ahora hacemos lo que nos da la gana". Y mientras tanto, el ciudadano, que confiaba en ellos, se queda pagando la factura, literalmente, en este caso con tasas más altas.
    Pero claro, no te preocupes, que cuando se acerquen las próximas elecciones volverán a tocar la puerta con nuevas promesas, más llamativas aún, como si nada hubiera pasado. Pues conmigo que no cuenten, que para engañarme otra vez tendrán que esforzarse mucho. Qué vergüenza, de verdad, ver cómo algunos políticos cambian tan rápido en cuanto tienen un poco de poder.

    ResponderEliminar
  3. VOX, menudo chollo han encontrado.
    De empleos precarios de sus concejales a sueldo abusivo.
    A chupar del bote mientras puedan.
    Golferia política

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A todos los que se esconden detrás del argumento, "hay que cumplir la Ley 7/2022" hay que decirles que también deben cumplir la Ley de Tasas y Precios Públicos, vigente desde la década de los 80 del siglo pasado y también deben cumplir la Ley Reguladora de las Bases del Régimen Local que dice: es responsabilidad del Ayuntamiento la depuración de las aguas residuales. Y, como no, también lo estipulado por la Ley del Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas, que exige a la Administración “debe contestar motivadamente” a los administrados y no utilizar el silencio administrativo como alternativa recurrente.

      Tener la autoridad no es garantía de estar en posesión de la verdad y mucho menos de la legalidad.

      Eliminar
  4. Valdemoriĺo y la golferia política de VOX.
    "Vox se vuelca contra la tasa de basuras y va al choque con el PP en los municipios más ricos
    La formación convocó una manifestación en Pozuelo contra la aplicación del nuevo impuesto y extiende la crítica a feudos populares en Madrid como Las Rozas o Boadilla del Monte en temas como la fiscalidad o el gasto público"

    ResponderEliminar
  5. Para que no se me olvide: Estoy con Luís.
    Amigos, después de leer vuestros comentarios, tengo que deciros que, estoy pensando en cambiarme la chaqueta, son tan malos, estos del centro derecha y de la extrema derecha, que me hacen dudar de mis principios más enraizados.
    Claro que, al rato, me paro a pensar en el Gobierno de Don Sancho, progresista dónde los haya y me acuerdo de:
    .. No pactaré con PODEMOS… “Al día siguiente”
    .. No habrá amnistía para los golpistas… “Pobrecitos”
    .. No pactaré con filo-etarras… “Pero, si son hombres de paz”
    Para que seguir.
    En cualquier caso, desde que tengo noticia de que, en Alemania, teniendo el doble de habitantes, que España, tienen la mitad de políticos que nosotros, no dejo de pensar que, el día que se crearon las autonomías, metimos la pata hasta las orejas. Ya no son autonomías, son “autonosuyas”, cada vez más avariciosas e independientes. Y ¿Por qué no? Si ya Franco mimaba al País Vasco y a Cataluña. ¿Por qué se tienen que aguantar las demás?
    Hablemos de podas y RRSU. ¿Iba de esto? Creo. En esto no puedo defender ni a PP, ni a VOX, en Valdemorillo. Este 2024, no ha podido ser peor. Antes tenía puntos, mejor o peor controlados en dónde yo podía ir y tirar mis podas o mis enseres, dentro de la urbanización. Me atrevo a decir, con muchas dudas, que el falló está en el hecho de que los camiones que recogían y/o limpiaban estos puntos, han tenido demasiadas averías. Quiero pensar que, lo que cuentan, de que no salían del taller, por no pagarse las facturas no es cierto. Quizás, la culpa sea de la Interventora que ha estado ausente más tiempo de la cuenta, quizás por enfermedad. Por cierto, corre el rumor de que la Señora Interventora recientemente llegada, se ha ido.
    Hace años que vengo defendiendo el hecho de que las podas se recojan en cada parcela. Así lo hacen en Villanueva de la Cañada y funciona estupendamente. Recoges tu poda, la dejas en bolsas dentro de tu parcela, llamas al Ayuntamiento, al día siguiente o al otro te dejan un contendor en tu puerta, vacías las bolsas, y al día siguiente se llevan el contenedor. Así llevo veintidós años haciéndolo y ni un fallo. Sin complicaciones, sin tanta norma, tanto contenedor, sin historias, INCLUIDO en el IBI. A lo peor, con esta modalidad de Don Sancho o de Doña Bruselosky, en el 2025 ponen esta tasa.
    Allá por los setenta, cuando venía a Valdemorillo los fines de semana, veía la urbanización de El Mirador del Romero. Se veían las casas y algún árbol que otro. Hace ya mucho que se ven las casas y muchos, muchísimos árboles. Quizás los “ecologetas”, vale, vale, los ecologistas europeístas de la Agenda 2030, no han caído en una cuenta: Si tener árboles, nos cuesta más de la cuenta, quizás dejemos de cuidarlos y de sembrar alguno más, ni volver a pensarlo.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

A LA ATENCIÓN DEL AYUNTAMIENTO: SU INCOMPETENCIA TENDRÁ CONSECUENCIAS

MI DESPEDIDA

Sr. Alcalde, informe con detalle al pueblo sobre el agua y otros temas