Denuncio: a los políticos que hicieron de su concejalía un “ganapán”
Mi comentario de hoy refleja el sentir de algunos ciudadanos "hartos" de la realidad política en Valdemorillo.
Denuncio: una situación donde estar en el poder se ha convertido en tener un buen sueldo, desviándose del verdadero propósito de la política que es: SERVIR A LA COMUNIDAD.
Denuncio: la práctica de aquellos políticos que, en su afán de mantenerse en el poder, cambian de partido según les convenga, donde la política deja de ser un servicio público y se convierte en un medio de subsistencia personal. Y cómo algunos concejales, en lugar de representar los intereses del pueblo, actúan de manera oportunista, utilizando a los ciudadanos como si fueran piezas en un tablero estratégico. Esta visión interesada les impide comprender que podemos organizarnos y movilizarnos libremente por causas que nos afectan y amenaza los principios fundamentales de la democracia y los intereses colectivos. En el fondo critico la falta de principios y una llamada de atención hacia aquellos que ocupan cargos, pero no actúan en favor de los intereses del pueblo, sino de los propios como ocurre ahora.
EN RESUMEN
Mi comentario expresa una frustración profunda ante la situación política en Valdemorillo, donde parece que la calidad democrática se ha deteriorado significativamente. El hecho de que ser concejal se haya convertido en una forma de subsistencia personal refleja no solo un fracaso del sistema político local, sino también un insulto a la inteligencia de los ciudadanos.
Comprendan que aún existimos ciudadanos comprometidos que, sin intereses personales ni políticos, estamos preocupados por lo que está ocurriendo, y que no estamos "a sueldo del enemigo", sino que nos movilizamos por responsabilidad cívica. Nos preocupa, y mucho, que este pueblo siga anclado a los intereses de unos pocos, sin que se tomen medidas para remediar la situación debido a la incapacidad manifiesta de quienes deberían actuar.
Llama la atención que, a lo largo de los años, los partidos democráticos no hayan cambiado de líderes, permitiendo que en el pasado se cometieran tantas injusticias juntas. Esta inacción contribuye a perpetuar un sistema en el que los intereses personales prevalecen sobre el bienestar colectivo, y genera una desesperanza que afecta a la confianza en las instituciones locales.
Cuándo veo a un concejal o concejala en horas de trabajo comprando me pongo mala. Además, ni tan siquiera les importa. Lo mismo me ocurre cuando busco un funcionario que tarda en volver a su trabajo. ¿Eso quién lo controla?
ResponderEliminarAunque pueda parecer anecdótico, refleja una situación que podría estar relacionada con la dinámica interna del ayuntamiento de Valdemorillo. Los recién llegados toman como referencia el salario del funcionario mejor remunerado, el secretario, para justificar aumentos en sus propios sueldos. Este ajuste no solo incrementa sus propios ingresos, sino también el del secretario, quien acaba siendo el principal beneficiado.
EliminarEn una futura auditoría del consistorio, sería necesario profundizar en lo ocurrido con respecto a los salarios, ya que el secretario termina ganando más que otros altos funcionarios, como: jueces, rectores, fiscales o catedráticos, Por supuesto bastante más que otros funcionarios del nivel 28, con varias décadas de experiencia en ministerios. Esto puede parecer desproporcionado en relación con las responsabilidades de esos cargos. Los alcaldes podría estar utilizando este mecanismo para legitimar aumentos salariales, basándose en estructuras y referencias internas, sin que necesariamente responda a criterios de mérito o necesidad.
Es un debate muy relevante el de la transparencia en los salarios de los funcionarios públicos, y claramente en el contexto de Valdemorillo, como en otros municipios, tiene un impacto profundo en la percepción pública y la confianza en las instituciones.
ResponderEliminarEn Valdemorillo, si se publicaran los sueldos de los concejales y otros funcionarios públicos, especialmente en comparación con los salarios de los empleados del ayuntamiento o de otros sectores como el de la educación (profesores, por ejemplo), probablemente generaría reacciones. Primero, si se descubriera que los concejales están recibiendo salarios que se perciben como excesivos en relación con sus responsabilidades, preparación o con los ingresos medios de los trabajadores municipales, se podría desencadenar una ola de descontento social. Esto se debe a que la desigualdad salarial es un tema delicado, especialmente en momentos en que la población enfrenta dificultades económicas.
El hecho de que los profesores del instituto, por ejemplo, estén ganando menos que los concejales mientras cumplen un papel crucial en la comunidad –educar a las futuras generaciones– es, como mencionas, un insulto para muchos. La educación, siendo una piedra angular del desarrollo de una sociedad, debería ser valorada adecuadamente, y las comparaciones salariales con los políticos locales podrían poner de relieve la falta de equidad en cómo se distribuyen los recursos públicos.
Prometer publicar los sueldos sería un paso importante hacia la transparencia y la rendición de cuentas. En el contexto político de Valdemorillo, esto podría tene efectos:miento de mayor transparencia y compromiso con los principios democráticos, lo que reforzaría la confianza en las instituciones municipales. Revelar desequilibrios significativos, y quizás obligar a los responsables a justificar mejor sus ingresos o incluso ajustar los salarios para que sean más proporcionales a las funciones que desempeñan.
Una vez que los ciudadanos tuvieran acceso a esta información, sería más fácil exigir cuentas, especialmente en un contexto donde los recursos públicos se gestionan con expectativas de equidad y eficiencia. También mayor transparencia desencadene tensiones si los sueldos se perciben como muy desiguales o si los concejales no pueden justificar su remuneración en comparación con otros trabajadores municipales.
En cuanto a la parte sobre los profesores del instituto, es cierto que el sector educativo a menudo es subestimado en términos salariales, y si se comparan estos ingresos con los de los concejales, especialmente en municipios pequeños como Valdemorillo, el descontento puede crecer. Esto puede verse como una falta de reconocimiento al trabajo vital que hacen los profesores, y la publicación de los sueldos podría poner esta desigualdad en el foco de la opinión pública.
¿Qué crees que pasaría en la comunidad si se publicaran estos sueldos? ¿Sería una oportunidad para generar cambios o simplemente crearía más controversia? Cuando quieras hablamos.
Hablaremos cuando quieras, pero antes me tienes que dar algún dato más para poder conectar contigo. Me da la sensación de que eres un profesor del instituto y por aso tienes fácil conectar conmigo
EliminarEs curioso, siempre que sale este tema, en las intervenciones populares en los plenos, siempre, oigo la misma respuesta: "Eso está publicado". Quiero suponer que estará en los presupuestos anuales, pero, mucho me temo, que debe estar como muy disimulado, más que disimulado invisible. Tampoco está publicado en el BOCAM. Resumiendo: LO DE LA LEY DE TRANSPARENCIA ES UN ENGAÑA BOBOS, los otros no nos creemos ni una pizca.
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