14 URBANIZACIONES NO TERMINADAS Y SIN RECEPCIÓN POR EL AYUNTAMIENTO.
El Ayuntamiento de Valdemorillo operó durante años, fundamentalmente en los setenta, con prácticas administrativas obsoletas y diversas irregularidades, aprovechando el auge de inversiones en parcelas por parte de ciudadanos de la Capital.
Que generó varios problemas:
- Falta de Planificación y Supervisión: La
indiferencia de los responsables municipales llevó a una planificación
urbanística deficiente, donde las infraestructuras esenciales y los
servicios necesarios no se desarrollaron de manera adecuada o en algunos
casos, estaban completamente ausentes.
- Prácticas Administrativas Obsoletas: El uso de
métodos administrativos anticuados dificultó la gestión eficiente y
transparente del crecimiento urbanístico. Esto no solo retrasó la
implementación de actuaciones necesarias, sino que también permitió
irregularidades.
- Irregularidades y Corrupción: La falta de
supervisión y control facilitó la aparición de prácticas posiblemente corruptas, afectando negativamente la confianza de los
ciudadanos en la administración local y comprometiendo el desarrollo
sostenible de la comunidad.
- Impacto en los Residentes: La combinación de estos factores tuvo un impacto directo en la calidad de vida de los residentes, quienes se encontraron con una infraestructura insuficiente y un entorno mal gestionado. Los problemas de servicios, como agua potable, saneamiento, electricidad, alumbrado público y recogida de basuras, afectó gravemente su bienestar diario.
No se consideró que no se debería haber entregado parcela alguna sin cumplir con las normativas establecidas en Planes Parciales o Normas Subsidiarias.
La falta de seguimiento y control en la construcción era evidente. Los funcionarios municipales no realizaban las verificaciones ni inspecciones necesarias. Esta ausencia de supervisión permitió numerosas irregularidades, como la emisión de certificados finales de obra sin que las parcelas contaran con servicios básicos como agua, luz y alcantarillado, debido a la falta de una depuradora.
No se debería haber permitido construir una vivienda sin la previa recepción municipal, pero la falta de control y las irregularidades administrativas permitieron que se llevaran a cabo sin cumplir con todos los requisitos necesarios.
Como consecuencia, los residentes experimentaron una sensación de inseguridad y una desconfianza significativa hacia las autoridades locales. Sin embargo, conviene destacar que, la legislación española ya establecia que los Ayuntamientos tenían la obligación de garantizar la prestación de servicios públicos esenciales en todas las zonas de su territorio, incluidas las urbanizaciones. Esta situación irregular pudo acarrear serias consecuencias tanto para los residentes como para el medio ambiente por no contar con permisos y supervisión adecuados.
Las urbanizaciones, necesitan contar con infraestructuras esenciales, vías de acceso seguras y servicios de recogida de basuras para garantizar una calidad de vida adecuada. La escasez de estas infraestructuras produjo un impacto negativo significativo en la vida diaria y el bienestar de las personas de urbanizaciones.
La falta de agua y saneamiento completo, pudo provocar problemas de salud graves. Las interrupciones en el suministro eléctrico afectaron el confort y la seguridad de los residentes, así como su capacidad para realizar tareas cotidianas y mantener dispositivos esenciales funcionando. El alumbrado público fue crucial para la seguridad en las calles y la prevención de delitos. Sin iluminación adecuada, aumento el riesgo de accidentes y la percepción de inseguridad entre los habitantes. Las vías de acceso seguras no se consiguieron, en algunos casos, para el transporte eficiente y seguro, tanto de personas como de bienes y servicios. Por último, los servicios de recogida de basuras que son vitales para mantener la higiene y salubridad en las urbanizaciones, tampoco se lograron. La acumulación de residuos pudo generar focos de infección y atraer plagas. Este déficit deterioró gravemente la calidad de vida en las urbanizaciones.
Construir sin los controles necesarios generó problemas para los propietarios de las viviendas, quienes podrían verse envueltos en litigios de construcciones. La falta de planificación y control ambiental pudo ocasionar daños al entorno natural o la alteración del paisaje. Además, el descontrol sobre el desarrollo urbanístico dificultó la planificación y gestión del territorio, generando escasez de recursos y una distribución desigual de los servicios públicos.
No pagar las tasas de obras posteriores privó al Ayuntamiento de recursos importantes que podrían destinarse a la prestación de servicios públicos, la mejora de infraestructuras o la realización de inversiones en el municipio. La dificultad para identificar y cobrar las tasas e impuestos de las urbanizaciones irregulares pudo obligar a aumentar los impuestos a los contribuyentes cumplidores o recortar los servicios públicos.
Profesor. mi padre me comentaba como se vendían terreno estando la empresa que urbanizaba pululando por la urbanización, durante este período, las promotoras se orientaban en vender terrenos, aprovechando la demanda y el interés de los compradores. Sin embargo, los responsables municipales mostraban una notable indiferencia y sin supervisión adecuada del desarrollo urbanístico.
ResponderEliminarEl pueblo según el Abaco que presenta profesor tenía algo más que mil quinientos habitantes. Efectivamente sus alcaldesas han formado parte de esa minoría valdemorillenses porque los que vivíamos en las urbanizaciones nos importaba poco lo que ocurría en el pueblo y solamente nos enterábamos cuando íbamos a los Gamella a comprar
Su padre tiene razón al describir la dinámica que se vivió en Valdemorillo durante el auge de las urbanizaciones. Las empresas urbanizadoras, impulsadas por la alta demanda y el interés de los compradores, se empeñaban en vender terrenos, aprovechando la coyuntura. Sin embargo, esta situación estuvo marcada por una falta de supervisión por parte de las autoridades municipales, lo que derivó en un desarrollo urbanístico sin el control y la planificación adecuados.
EliminarEl caso de Valdemorillo no es único. Muchos pueblos también experimentaron un crecimiento acelerado de urbanizaciones, a menudo con una supervisión pública deficiente. Esto ha generado diversos problemas, como la falta de infraestructuras adecuadas, la proliferación de viviendas y la desconexión entre los nuevos residentes y los núcleos urbanos tradicionales.
Sin embargo, como bien señala, la falta de interés de los residentes en las urbanizaciones por lo que ocurría en el pueblo ha dificultado la integración y la cohesión social, agravada por la escasa comunicación entre ambos sectores, ha impedido un desarrollo armónico y equilibrado del municipio.
Para afrontar estos desafíos, es fundamental fomentar la participación ciudadana, tanto de los residentes en el pueblo como de las urbanizaciones. Es necesario crear canales de comunicación efectivos y espacios de encuentro donde se puedan discutir los problemas y las soluciones de manera conjunta.
Las autoridades municipales también tienen un papel crucial que desempeñar. Deben establecer mecanismos de control y seguimiento más rigurosos del desarrollo urbanístico, garantizando que se cumplan las normas y se respeten los derechos de todos los ciudadanos.
En definitiva, la historia de las urbanizaciones en Valdemorillo es un recordatorio de la importancia de un crecimiento urbano planificado, sostenible e inclusivo. Solo a través de la colaboración entre todos los actores involucrados -residentes, urbanizadoras y autoridades- se podrá construir un futuro próspero y armonioso para el municipio.
Agua pasada no mueve molino.
ResponderEliminarLo que dice Luís Herranz en el escrito anterior, es lo que yo llamo disolver las EUCC de un plumazo. Nunca debió permitir el Ayuntamiento que los promotores se fueran de vacío, de vacío es un decir, se fueron, cuando consideraron que ya no podían sacar más rentabilidad a su inversión, se fueron sin terminar las infraestructuras y, en ese instante sublime, el Ayuntamiento, acordó con ellos constituir las EUCC, cargándole el trabajo restante a los compradores de parcelas. Debían ser muy ignorantes, sí, quiero pensar que eran muy ignorantes, que otra cosa, que es lo que pensamos muchos, los funcionarios y los políticos para no saber que, antes de esa constitución de las EUCC:
.. Primero. Hay que terminar las infraestructuras.
.. Segundo. El promotor entrega las infraestructuras para su recepción.
.. Tercero. El Ayuntamiento recepciona, mediante el acta correspondiente, acta que debe recoger lo que está pendiente de terminar o corregir, para obligar al promotor a dejar, todo, en estado de revista, que decíamos en la mili.
.. Cuarto. No sé, si antes o después, los promotores deben ceder los terrenos, viales y demás cosas de uso público al Ayuntamiento.
.. Quinto. El Ayuntamiento debe inscribir en el Registro de la Propiedad, a su nombre lo que le ha sido cedido, gratis, naturalmente. Algún día, alguien explicará porque esa inscripción no se ha llevado a cabo todavía, no solo eso, nadie habla de ello.
.. Sexto. El Ayuntamiento exige a los propietarios que se constituyan en una EUCC, informando de cuáles son sus obligaciones. Tampoco se ha hecho nada de esto, hasta hace cuatro días, como quien dice.
.. Séptimo. Desde el primer día, el Ayuntamiento tenía la obligación de TUTELAR las EUCC y no permitir que, en las asambleas se aprobaran, bajo el nombre de la EUCC: Obra nueva o terminación de las que no estaban terminadas, cómo en Mojadillas, doscientos diez metros de alcantarillado nuevo hace nada; clubs sociales; fiestas; vigilancias; cortes de calles con barreras de acceso y vigilantes. Curiosamente, se han suprimido todas, menos dos entradas de acceso y salida de Mojadillas a la M-600. Hay para no parar.
.. Octavo. Contestar a las impugnaciones y/o recursos hechos por la aprobación de gastos que no corresponden a una EUCC.
.. Noveno. Reponer la legalidad urbanística, donde quiera que algún propietario de parcela, se hubiera apropiado (OKUPADO) de aparcamientos de uso público. c/ Flor de los Almendros.
.. Décimo. El Ayuntamiento tiene que suministrar el agua a cada vecino. Este, es un palo, que la Señora Tesorera, recién llegada, ha dado al La Señora Interventora, al Señor Secretario, a la Señora Arquitecto y al Concejal de Urbanismo y Urbanizaciones y, de rebote, al Señor Alcalde, cuando en su escrito dice: El recibo del agua, no se puede exigir por la Vía de Apremio del Ayuntamiento, porque no es una labor de conservación y mantenimiento a los que están obligadas las EUCC.
.. Undécimo. Agradecería a los señores Funcionarios del Ayuntamiento y a cualquiera que sepa más que yo que corrijan y complementen esta lista.
"Pa" que seguir, el que quiera seguir pagando a unas EUCC ilegales, que siga. Yo, no.
Se me olvidaba: DISUELVANSE YA LAS EUCC.
Pasadlo bien. Andrés
D. Andrés, la frase "agua pasada no mueve molino" generalmente sugiere que no tiene sentido preocuparse por eventos pasados que ya no se pueden cambiar. Sin embargo, en este contexto, parece que estás diciendo que, a pesar de que algunas personas responsables por decisiones urbanísticas equivocadas siguen presentes, no se ha tomado ninguna medida para hacerles asumir sus responsabilidades.
ResponderEliminarLos funcionarios públicos deben rendir cuentas por sus acciones, especialmente cuando han causado problemas significativos. En este caso, parece que el secretario municipal y algunos antiguos alcaldes tienen un historial de decisiones cuestionables sin enfrentar consecuencias.
La ciudadanía debería tener el poder de exigir rendición de cuentas. Organizarse para asistir a los plenos del ayuntamiento, presentar quejas formales, y utilizar los medios de comunicación para destacar estos problemas puede ser una manera efectiva de presionar a las autoridades. Además, si hay pruebas de irregularidades o mala gestión, debería ser posible presentar denuncias ante organismos de control interno o incluso ante la justicia. En muchos países, existen mecanismos para investigar la corrupción y el mal uso de los recursos públicos.
Por otra parte, es importante recordar el poder del voto. Participar activamente en las elecciones locales, informarse sobre los candidatos y sus historiales, y votar por aquellos que promuevan la transparencia y la buena gestión puede cambiar el rumbo del gobierno local. Igualmente formando comités o grupos de vigilancia ciudadana que monitoreen las acciones del ayuntamiento y nos mantengan informados sobre cualquier irregularidad puede ser muy útil.
"Entiendo que el dicho 'agua pasada no mueve molino' se usa para indicar que no debemos preocuparnos por lo que ya pasó. Sin embargo, cuando los responsables de decisiones erróneas en temas de urbanización aún están presentes y continúan sin asumir sus responsabilidades, es fundamental tomar acción. El secretario municipal ha acumulado un cesto de responsabilidades y sigue actuando sin consecuencias. Algunos de los antiguos alcaldes continúan influyendo en los plenos. Es imperativo que exijamos transparencia y responsabilidad para evitar que estos errores se repitan y se haga justicia con respecto a los errores del pasado."
Sr Rodríguez de Rivera, eso es lo que debería guiar la mentalidad de un ciudadano que vive en un país dentro de un estado de derecho; pero para llevar a cabo una acción como la que apunta, sería necesario algo más que simple sensibilidad ciudadana. En estos casos que la justicia funcionara con mayor celeridad cuando una parte de lo que usted refiere puede estar documentado.
EliminarSu observación es muy relevante y destaca varios problemas fundamentales en la administración pública y la justicia. La necesidad de una justicia rápida y eficiente es crucial para mantener la confianza de los ciudadanos en el estado de derecho. Sin embargo, el caso que menciona pone de manifiesto varios problemas que pueden socavar este principio.
Yo como técnico, he conocido en este pueblo como un funcionario público controlaba un proyecto firmado por su pareja, que constituye un claro conflicto de intereses. En un estado de derecho, este tipo de situaciones deben ser evitadas mediante la implementación de políticas estrictas y transparentes para prevenir y gestionar los conflictos de interés. Este tipo de actos, donde los funcionarios públicos se benefician personalmente de sus posiciones, son ejemplos de corrupción y nepotismo. Estos problemas erosionan la confianza pública y afectan negativamente la percepción y la eficacia de las instituciones.
La observación sobre la necesidad de que la justicia actúe con mayor rapidez es crucial. Sin embargo, para que la justicia pueda actuar, es fundamental que se presenten denuncias formales y bien documentadas. Los ciudadanos, especialmente aquellos que son testigos directos de irregularidades, como en este caso yo, debemos sentirnos protegidos y respaldados para denunciar sin temor a represalias.
Amigo Andrés, la transparencia en los procesos y la supervisión independiente son esenciales para garantizar que los proyectos públicos se gestionen de manera adecuada y sin favoritismos. La existencia de organismos de control, tanto internos como externos, puede ayudar a prevenir y detectar irregularidades. Finalmente, es importante que se promueva una cultura de integridad y ética tanto en el sector público como en el privado. Esto implica no solo la formación técnica y legal, sino también la promoción de valores éticos y cívicos desde una edad temprana.
En resumen, para que el estado de derecho sea efectivo, es necesario no solo que las leyes y las políticas estén bien diseñadas, sino también que se implementen de manera efectiva y se cuente con mecanismos que aseguren la transparencia, la rendición de cuentas y la participación ciudadana. Su testimonio es un recordatorio de la importancia de estas prácticas y de la necesidad de seguir trabajando para mejorar nuestros sistemas de justicia y administración pública.
Amigos, yo no soy abogado, ni quiero serlo, ni quiero tirar el Valle de los Caídos, hago lo que me parece mínimamente aceptable, intentar abrir los ojos a los que, ahora, pueden remediar lo mal hecho. Intentaré apoyarles en lo que pueda, porque creo que están en esa idea. También es verdad que, estoy convencido, que solo hay una manera de hacerlo bien y rápido: Presentar en pleno la propuesta de disolución automática de las EUCC y, luego, ir haciendo todo eso que quieren hacer los amantes de protocolos, que, para esto, hubo su tiempo, ahora no ha lugar. Luego, poquito a poco y según el dinero y los medios disponibles rematar la faena. Naturalmente, una vez aprobada la disolución, se suprimen las cuotas, todas y los que quieran tener clubs sociales, guarderías y lo que quieran, que se agrupen en asociaciones y que hagan lo que quieran. Si para liquidar las EUCC, no llega con lo que se tenga en caja, habrá que poner lo que sea menester, con el visto bueno de la Intervención del Ayuntamiento. Siempre el Ayuntamiento.
ResponderEliminarPasadlo bien. Andrés.