Las irregularidades derivadas de un deficiente control técnico
municipal.
Los impuestos sirven o
deberían servir para costear
necesidades colectivas, como servicios, administración pública, infraestructura
y programas sociales ... Estamos pagando el IBI en las urbanizaciones de
Valdemorillo desde hace casi medio siglo, únicamente para servicios de administración
y sueldos de los políticos. Los Poderes públicos y la sociedad en general deben
terminar asumiendo que se trata de una injusticia clara y discriminatoria.
Madrid
se configuraba como área metropolitana mono céntrica típica, compuesta por una ciudad
central, asiento de prácticamente todas las funciones superiores y destino con
grandes carencias dotacionales. Con la regularización del suelo del año 1956 se
aboga por una conquista del terreno para urbanizar con edificación masiva y la
ley del suelo se supeditó a los intereses de los grupos de promotores. Este
importante crecimiento urbanístico se trasladó a la morfología urbana con
grandes complejos asentados en la periferia. Valdemorillo fue un ejemplo en
donde miles de madrileños compraron su parcela en alguna de las urbanizaciones
que aparecían como forma de inversión para a construir un chalet, que
inicialmente suponía solo el aposento ocasional durante la etapa de vacaciones.
Cualquier inversor podría comprar un espacio rural y con un simple proyecto de
Plan Parcial conseguía que se pudiera edificar en cualquier amplio espacio
rural. El Ayuntamiento de Valdemorillo ponía pocas trabas a: promotores,
constructores y nuevos propietarios, ya que lo importante, lo fundamental, era
engordar las arcas municipales con permisos y licencias. Algunos urbanizadores
dejaban también una fianza para después recogerla cuando cumplieran con su
proyecto de reparcelación y dotación de servicios. Sin embargo, algún promotor
se marchó sin haber cumplido su compromiso urbanístico. Pero sin embargo no
evitó la venta de parcelas, incluso su edificación ya que eso suponía una nueva
fuente de ingresos para el Consistorio.
Los
madrileños, nuevos propietarios, dejaban claro que ellos eran de la capital y
que su “chalet” era de vacaciones y por tanto su integración en el tejido
social del pueblo no resultaba prioritaria. Como ya he contado en alguna
ocasión: algunos de esos propietarios se trasladaron a vivir a Valdemorillo,
otros vendieron sus casas a otros pobladores y algún vecino del pueblo. Las
urbanizaciones de Valdemorillo fueron creciendo hasta tener mayor censo que el
pueblo.
Lo que no cabe menor duda es que la Sociología como ciencia que se ocupa de la
realidad social, nos podría servir para analizar e interpretar el fenómeno de
la resistencia que siguen teniendo las urbanizaciones para su total integración
en el tejido social del pueblo. Las causas obedecen fundamentalmente en la
falta de interés de ambas partes y a la incapacidad de los políticos
municipales para hacer de la Integración una necesidad y de la discriminación
una preocupación que debería neutralizarse para el progreso del pueblo. La discriminación puede
adoptar muy diversas formas. En algunas ocasiones, se manifiesta a través de la
negación del acceso a servicios básicos y un distanciamiento de la gestión
municipal en su conjunto.
El
asunto de la integración de las urbanizaciones en el tejido social de
Valdemorillo corresponde a un trabajo de gestión política que debería
traducirse en un proceso de análisis presupuestario y gestión política que este
Gobierno no se encuentra preparado para acometerlo de manera que se traduzca en
una realidad integradora necesaria. El abandono que han tenido en el tiempo de
alguna urbanización, a pesar de haber sido recepcionada en un Pleno, ha supuesto.
Quisiera detenerme, profesor, en uno de los aspectos que comentas en tu artículo, el de que la deficiente gestión urbanística por parte del Ayuntamiento provoca que algunos vecinos de las urbanizaciones teman que sus intereses puedan resultar aún más dañados una vez que se consuma la recepción. Creo que es imprescindible hacer mucha pedagogía a este respecto, porque lo cierto y verdadero (en mi opinión) es que la increíble dejación que sufren las urbanizaciones ha sido posible por esa oportunidad de mirar para otro lado que ha tenido el consistorio todo este tiempo, y que sigue teniendo. La dejación existe y puede existir por ese resquicio (o grieta de tamaño abismal) que el Ayuntamiento utiliza para no cumplir con sus obligaciones. Hay que acabar con esta situación, y exigir de todas las formas y maneras posibles la recepción efectiva de las urbanizaciones, de todas, para que el Ayuntamiento no pueda decir nunca más que los problemas que las aquejan no son de su negociado. Por cierto, impagables las fotografías con las que acompañas el artículo. ¡Gracias!
ResponderEliminarLo más lamentable está en el conocimiento real de la situación que llevan teniendo los políticos desde hace muchos.
EliminarTodos los gastos de mantenimiento del pueblo y las urbanizaciones deben salir de los impuestos de los casi 12000 ciudadanos que pueblan Valdemorillo. Y con la Transparencia necesaria, los políticos deben hacer frente a la gestión municipal de la mejor forma posible. Por esa razón no se deberían permitir las ligerezas en los gastos que se vienen realizando desde hace muchos años por parte de algunos políticos que están en la plataforma de gobierno.
En las empresas privadas si metes la pata en tu curro te echan a la calle, en los ayuntamientos los gobiernos meten la pata por ineptos y nosotros pagamos los juicios y demandas que pierden por mal gestión , y ellos cobran sus sueldos igual. Si un concejal o Alcalde tuviera que pagar de su bolsillo sus negligencias, la gente se pensaría mas meterse en la política barata que ejercen, sin preparación y sin espíritu de servicio, Que es la base de el desastre actual. Falta de moral y ética.
ResponderEliminarProfesor, debes darte cuenta que el problema fundamental de este pueblo pasa por la preparación de los políticos que no han ido tocando los últimos años y cuya función principal era mirar a sus intereses y actuar conforme a ellos.
ResponderEliminarCada cual ha empleado sus armas para conseguir vivir mejor y tal vez sea esa es la razón fundamental por los que algunos perduran y perduran año tras año en puestos políticos del Ayuntamiento de Valdemorillo. Además hay que echar la culpa correspondiente a los grupos políticos que permiten que esto ocurra.
Valdemorillo necesita otros políticos preparados y capaces de afrontar la problemática que se viene arrastrando desde hace muchos años no valen aquellos que se andan con paños calientes sistemáticamente
Gestionar, gestionar, estamos cansados de decir que para gestionar bien un ayuntamiento de Valdemorillo se precisa saber gestionar, tener estudios o conocimientos básicos en la gestión de una empresa. En el ayuntamiento tenemos al menos el 5O% de los concejales que no tienen ni idea ¿Cómo van a poder solucionar toda la morralla retrasada? Es imposible y así va la gestión municipal en donde se toca de oído. El problema también está en que las decisiones políticas interesadas se oponen a las técnicas.
ResponderEliminarPues yo me conformo con que no prevariquen. Si el Secretario y los técnicos fuesen honrados, su experiencia y conocimientos serían suficientes para enseñar a los concejales noveles en sus inicios. Lamentablemente tenemos un problema muy serio de probable corrupción. Según lo acontecido en el último pleno, una pregunta formulada por el PSOE ha destapado lo que puede ser un caso serio de malversación de fondos públicos, que puede llevar al alcalde y al Concejal de Urbanismo a acompañar a Pilar López Partida en su más que probable Vía Crucis judicial.
ResponderEliminarSr anónimo, está usted obligado a dar más detalles o callarse. Estamos todos en un mismo barco.
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