No queremos tantos incompetentes en el Pleno Municipal.
Es un derecho de los
ciudadanos a contar con los mejores dirigentes y el deber de los partidos
proporcionárselos.
Cuando se
antepone la ideología a que las cosas funcionen se olvida que también para
llevar nuevas ideas se requiere de competentes. Los partidos políticos deberían
tener entre sus funciones elegir a “los más aptos” para presentarlos como
candidatos a unas elecciones municipales. Para una mayoría del electorado
existe el convencimiento que sus únicas obligaciones para con el pueblo son:
votar y pagar sus impuestos. Por falta de capacidad, un gobernante, se rodea de
aduladores o pelotas, jetas y ...,
Ayer mantuve una larga conversación telefónica de más
de una hora con un titular en el Pleno, del que creo puede salvarse de esta
reflexión. Coincidía con en la necesidad de tener Concejales preparados para
que la gestión municipal de Valdemorillo pueda ir por buen camino. Teniendo en
cuenta que el Ayuntamiento con más de un centenar de empleados, mueve un
presupuesto muy importante y que deberia ser debidamente gestionado como una
gran empresa de todos. Yo seguía insistiendo en que con los mimbres que tiene
actualmente el Consistorio y con una oposición floja iba a ser difícil... , prudentemente mi
interlocutor enmudeció.
Antaño, era común entre los filósofos el tratar las
características y condiciones que debían reunir los gobernantes. Baste recordar
a Aristóteles cuando señalaba que “los que aspiran a saber de política necesitan también experiencia”.
Posteriormente Maquiavelo en “El Príncipe” describió al gobernante de un Estado
moderno donde la ética se ponía al servicio del interés de la supervivencia.
Nunca como en nuestros días y en particular en nuestro país había
cobrado preeminencia el argumento de que democratizar suponía que “cualquiera”,
sin especiales requerimientos más allá de la elección popular o la cercanía
personal al jefe de turno, pudiera participar en la tarea de ser concejal.
La auténtica democracia debería servir también para
seleccionar a los mejores, a los más virtuosos y sabios. Es decir, que los
partidos políticos deberían tener entre sus funciones elegir a “los más aptos” para presentarlos como
candidatos a unas elecciones para dirigir los designios del gobierno municipal
y sus concejalías. Se requiere de
gobernantes competentes y que es un derecho de los ciudadanos contar con los
mejores dirigentes posibles y un deber de los partidos políticos
proporcionárselos.
Sr. Alcalde, me
parece una inmoralidad, para los tiempos que vivimos, que un Concejal o una
Concejala pueda estar calentando un sillón cualquiera mes tras mes sin aportar
ningún beneficio positivo a Valdemorillo y termine su legislatura de cuatro
años sin balance positivo alguno. En España, al menos en los últimos tiempos, la mayoría
de los partidos seleccionan a sus dirigentes para alcanzar el poder, pero no
prestan la misma atención a prepararse para ejercer ese poder con rigor o
eficacia. Eso lo dejan, en su caso, para el día después de las elecciones,
cuando ya es tarde para recuperar el tiempo perdido, cuando se impone el pago de favores o al mero juego de equilibrios,
además de otros acuerdos espurios. Para decir verdad, esta situación subsiste
desde hace años en Valdemorillo, porque el electorado lo permite, y además para
una inmensa mayoría del electorado existe el convencimiento que sus únicas
obligaciones para con el pueblo son: votar y pagar sus impuestos, por eso
resulta anecdótico entrar a valorar criterios de eficacia, o profesionalidad. No se vota al dirigente más preparado sino al dotado de un clan familiar más
numeroso y pueda suministrar algún trato preferente. En otras palabras, en el
juego electoral tiene más importancia hablar del interés de los pactos que de
la estructura del gobierno municipal.
Cuando se antepone la ideología a que las cosas
funcionen se olvida que también para llevar nuevas ideas a la práctica con
éxito se requiere de gobernantes competentes y que es un derecho de los
ciudadanos contar con los mejores dirigentes posibles y un deber de los
partidos políticos proporcionárselos. Por tanto, sorprende sobremanera que
precisamente cuando más difícil resulta gobernar menos atención se preste en
nuestro país a preparar adecuadamente a sus gobernantes para hacerlo.
Nadie duda de que el Alcalde elegido por los
ciudadanos, esté legitimado para tomar decisiones públicas, que también lo
estén los Concejales de gobierno. Sin embargo, esa legitimidad es un requisito
sine qua non pero no suficiente para garantizar que se tomen las mejores
decisiones para el pueblo. ¿Cómo es posible que no tengamos todavía un PGOU
para Valdemorillo? ¿Cómo es posible que se haya construido una Plaza de Toros
con mil problemas y un uso extemporaneo en lugar de una residencia para los
ancianos del pueblo? Como es posible que se haya llegado hasta este punto en el
asunto de Fuentevieja… y podíamos seguir y seguir, pero prefiero dejarlo aquí
para no calentar los ánimos
Lo que nadie me puede negar es que una persona
legitimada por las urnas no está libre de tomar malas decisiones que puedan
poner en peligro incluso el logro de los objetivos por una inadecuada
preparación, por haberse rodeado de un mal equipo o por no saber escuchar a quienes
alertan sobre riesgos o costes no previstos. Me da la sensación que también
este alcalde rechaza el tener personas alrededor con criterio propio capaces de
llevarles la contraria, a diferencia de lo que aconseja el sentido común: “El príncipe prudente (…)
debe preguntar mucho, escuchar a todos los preguntados con verdadera paciencia
y mostrar cierto resentimiento a aquellos que, contenidos por algún respeto, no
le digan entera su opinión” Fragmento
del Príncipe de Maquiavelo.
Debo terminar con una reflexión, con algo que
considero importante: ya que de los errores o riesgos potencialmente más
perniciosos cabe destacar, incluso más que la falta de capacidad de un
gobernante, el de rodearse de aduladores o pelotas, jetas o aprovechados y ...,
aunque en muchas ocasiones dos o más de estas características suelen convivir
en los mismos sujetos. Curiosamente un Concejal poco preparado atraerá como un
imán a este tipo de personas pues suelen encontrarse al acecho del poder y sólo
los muy avispados.
Los ciudadanos deberíamos ser muy exigentes con nuestros líderes, a los que entregan nada menos que el poder de decidir por los demás, pero los muy imbéciles ni siquiera les exigen que sepan idiomas. Deberían pedirles estudios superiores, certificados de limpieza penal y someterlos a todo tipo de pruebas. Países como España son un ejemplo vivo y elocuente de los daños terribles que pueden causar los malos dirigentes cuando se adueñan del poder. Miles de políticos españoles han robado, oprimido a los débiles, practicado el nepotismo, engañado a los ciudadanos, marginado a sus enemigos, utilizado el dinero público para fortalecer su poder personal y propagado todo tipo de vicios y corrupciones, infectando la sociedad hasta límites que jamás debieron ser soportados por una ciudadanía digna y decente. Aunque los políticos aparecen en las encuestas españolas como el "tercer" mayor problema del país, en realidad son el primero, a mucha distancia del resto, porque el político es el responsable de otras graves preocupaciones como el desempleo y el mal estado de la economía
ResponderEliminarEs muy posible que en una apuesta de voluntariado de concejales cobrando únicamente cuando el electorado saca algún beneficio los candidatos estarían mejor preparados.
ResponderEliminarMe encantaría saber a qué dedicaban su tiempo los Drs concejales y lo que es más importante ¿Si no estuvieran se notaría? Me imagino que algún trabajador estaría trabajando mejor sin un político retrasando el trabajo. Pregunten ustedes pregunten y se convencerán.
Jesús, no tienes remedio, mejor, no tenemos remedio. Por lo que se ve, el mundo no tiene remedio. Mandan los que tienen "pasta" porque ellos son los que ponen y dejan de poner. No lo hacen de manera directa, pero, mira lo que hemos vivido algunos en España. Los que nacimos poco después de la Guerra Civil, nos educamos en el respeto a nuestros mayores, a nuestros maestros a nuestros jefes a muchas cosas. Es verdad que alguna vez nos dieron algún guantazo, que no cachete. Un día se murió Franco, que lo dejó preparado para que llegara la democracia. Vino Felipe González, le pusieron los de la pasta porque les interesó, hizo la reestructuración industrial. Hasta hace unos días, no me he enterado que la hizo, no porque hiciera falta, fue el precio que tuvimos que pagar para entrar en Europa. Implantó la LOGSE, aprobar y/o pasar de curso por la jeta. Fábrica de mano de obra barata para... no sé. Vino la Movida Madrileña, con Tierno Galván, el destape, las drogas... Una de mis hijas, con cuatro o cinco años, decía "papa, es la época que nos ha tocado vivir". Aumentaron los divorcios, desapareció poco a poco la censura, se hizo normal en las películas los niños en familias con padres o madres que no eran los suyos. Se implantó, en esos cien años de honradez, la corrupción. Nos arruinó. Vino Aznar, nos sacó de la ruina, la foto de las Azores y una guerra en la que no teníamos que haber estado, también hubo corrupción. El 11 M, elecciones para Zapatero, más desvergüenza, más de todo, más corrupción y otra ruinera, más gorda. Contactos con Venezuela y PODEMOS. Llegó Rajoy, recupero buena parte de la economía, sigue la Corrupción, se traga todas las leyes ideológicas de la izquierda, parece que las aplaude, le montan un pollo y nos deja tirados. Llega Don Pedro, más de lo mismo, filo-etarras y separatistas al poder, quieren deshacer España, se dicen un estado aconfesional y son auténticos anticatólicos. Si había chiringuitos se multiplican... Y nosotros, los votantes haciendo el "gilipuertas" en todos los sentidos, los políticos nos engañan como a chinos, en especial a los afiliados. Pero, tal como yo lo veo, los más engañados, en todo, los votantes de izquierdas, perdonadme, pero es así, todo porque os dicen que os van a dar no sé qué, si no crean puestos de trabajo, que es lo único que puede salvarnos, ¿Que nos van a dar?
ResponderEliminarJesús, si estas cosas pasan a nivel nacional que le podemos pedir a estos amigos del pleno de Valdemorillo. Pero hay algo que es verdad, la selección de personal en los partidos es una KK o está orientada a otros fines, que nada tienen que ver con mejorar el bienestar de los ciudadanos. Franco dejó una clase media, más o menos interesante, con tanta ruinera, terminará por desaparecer.
El alma, y eso que tengo amigos que dicen que no existe, me duele al ver lo que está pasando, pero mi situación de "gilipuertas" no me dice que más podría hacer, aparte de escribir una tontería detrás de otra.
Pasadlo bien. Andrés