la corrupción en España se ha llevado 100.000 millones de euros
VIVIMOS
EN UNA SOCIEDAD ENFERMA Y CONDENADA
Cuando
percibas que muchos se hacen ricos por el soborno y las influencias y las leyes
no te protegen; cuando descubras que la corrupción es recompensada y la
honestidad un sacrificio. Entonces podrás afirmar, sin temor a equivocarte que
tu sociedad está condenada. (Alissa Zinóvievna)
El día 1 de Mayo, a nivel
internacional, se celebra la fiesta del trabajo, se conmemora cuando los trabajadores
luchaban por reducir la jornada laboral de 12 y 16 horas corridas a una de 8.
Eran un grupo de sindicalistas anarquistas de la ciudad de Chicago que el 1 de
mayo de 1886 comenzaron una protesta por sus derechos. La huelga que duró tres
días desencadenó en un episodio sangriento entre los trabajadores y la policía. Tres días después, se convocó a una concentración en Haymarket
Square y tras una explosión murieron varios policías.
Parece que ha quedado patente que los
logros sociales se consiguen desde la concienciación primero y la lucha después.
Pero antes de nada se debe de tomar cognición de la realidad sociológica que
ahora estamos viviendo. En España estamos en un momento histórico en donde la corrupción se ha llevado 100.000 millones de euros, una autentica burrada para un país
en el cual, una persona de cada cinco está viviendo en el umbral de la pobreza.
Precisamente en estos momentos me viene a la memoria un texto de, Alissa Zinóvievna una filósofa
y escritora estadounidense de origen judío ruso, ampliamente conocida por haber desarrollado un sistema filosófico al que denominó «objetivismo».
Que le permite al ser humano vivir como ser humano, es decir, haciendo uso de
su facultad de razonar. En consecuencia, rechazaba absolutamente el socialismo,
el altruismo y la religión.
Alissa
Zinóvievna, escribió lo
siguiente: Cuando adviertas que para producir necesitas autorización de
quienes no producen nada ; cuando compruebes que el dinero fluye hacia quien no
trafica con bienes sino con favores, cuando percibas que muchos se hacen ricos
por el soborno y por las influencias más que con el trabajo y que las leyes no
te protegen contra ellos sino, por el contrario, son ellos los que están protegidos
contra ti; cuando descubras que la corrupción es recompensada y la honestidad
es un sacrificio, entonces podrás afirmar, sin temor a equivocarte que TU
SOCIEDAD ESTA CONDENADA.
Vivimos en una sociedad condenada por
la corrupción, en donde la injusticia campa a sus anchas: una parte del
ejecutivo arroja balones fuera y el poder judicial es demasiado dependiente del
poder y de la parte mayoritaria del legislativo. En una sociedad que llega
acostumbrarse que la corrupción supermillonaria sea parte importante del paisaje
político, que no es capaz de reaccionar ante la injusticia manifiesta. Esa
sociedad está enferma, está herida de muerte y necesita una verdadera catarsis
social que permita situar a las cosas en su sitio. El problema de la corrupción
no constituye un caso aislado, la corrupción está imbricada en el tejido social
de España.
Cada hombre es un fin en sí mismo, no el medio para los fines de otros. Debe existir por sí mismo y para sí mismo, sin sacrificarse por los demás ni sacrificando a otros. La búsqueda de su propio interés, su propio racional y su propia felicidad es el más alto propósito moral de su vida.
ResponderEliminarConforme con Juan, cada cual debe ser responsable de distinguir por su casuística moral, el nivel de sus actos y la repercusión en el entorno social.
EliminarCualquier cosa, por pequeña que sea que obligué a otros, debe de Sr teñida en cuenta. Pongo un ejemplo sencillo, cundo sacamos a defecar a nuestro perro debemos recoger sus restos para que otro no se los lleve en el zapato maldiciendonos.
Os equivocáis los dos, cuanto más renuncies a ti mismo y más te des a los demás, sin esperar nada a cambio, mejor te sentirás. "Palabrita del Niño Jesús". Esto es de lo poquito que ya creo.
ResponderEliminarPasadlo bien. Andrés