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9/17/16

LA PROCESIONARIA. UNA PLAGA QUE HAY QUE ELIMINAR


En el inicio del otoño comienza su ciclo biológico
Al inicio de la primavera es frecuente encontrar procesionaria por el suelo de donde haya coníferas y fo

rman largas hileras de orugas en movimiento. Son sensibles al frío y a la humedad, vive en los pinos, no suelen ser comunes en las zonas lluviosas o por encima de los 1500 m del nivel del mar. 

Esta oruga de color gris, cuenta en su dorso con unos pelos rojizos, con una sustancia urticante que la protege de sus depredadores, quiénes con sólo tocarla u olfatearla pueden sufrir reacciones alérgicas importantes.

El ciclo biológico de la oruga procesionaria comienza por estas fechas. Durante el invierno las larvas suelen permanecer en el nido durante todo el día y salen por la noche para comer las hojas del pino, excepto en las noches muy frías en las que también comen durante el día. Cuando finaliza el frío del invierno, disminuyen las lluvias y empiezan a subir las temperaturas, las orugas empiezan a descender en forma de procesión buscando un lugar adecuado donde enterrarse y empezar a transformarse en crisálida que eclosionará a finales de verano en forma de polilla. Las polillas, que tienen una vida corta, vuelan al atardecer y ponen sus huevos en las hojas de los pinos. Los huevos que las polillas han puesto en el pino se abren a los pocos días y de ellos nacen las larvas que aprovechan para alimentarse de sus hojas hasta que son capaces de desplazarse a otra zona en la que construirán sus nidos. Los bolsones de oruga procesionaria construidos en las copas de los pinos son fácilmente reconocibles porque parecen de algodón.
En los perros, la reacción tras el contacto con la procesionaria del pino es inmediata: se les inflama la lengua y aparece una coloración roja o amoratada, ampollas con líquido y úlceras que pueden producir yagas importantes en alguna parte de la lengua. Por contacto sufrir una urticaria, o eritemas, necrosis e incluso la muerte si fuese ingerida.
Como eliminar la procesionaria.

Aunque la plaga resulta más peligrosa en primavera, debemos actuar en previsión para eliminar la Procesionaria del pino colocando unas inyecciones en el árbol, de fácil aplicación entre el 15 de Octubre y el 15 de Diciembre, siendo la mejor época a comienzos del otoño, hasta diciembre para colocar las inyecciones. El producto fitosanitario va a penetrar en el sistema vascular del pino distribuyéndose llegando a las orugas que comen sus hojas y matándolas. Es conveniente a inicios del otoño porque las orugas todavía son pequeñas, se están alimentando, y al morir y caer al suelo no son peligrosas porque todavía no tienen pelos urticantes. Con un sólo tratamiento al año es suficiente para combatir esta plaga esa temporada, debiendo repetir al año siguiente. Hay que tener la precaución que el tratamiento siempre  debe aplicarse por personas especializadas.

También unos procedimientos naturales para quitarlas de en medio: A) Eliminar los bolsones cortándolos uno a uno, excepto los que estén en las guías terminales, ya que pueden dañarse éstas y sería peor. Antes de cortarlos regarlos bien para disminuir las urticarias.  B) Romper las bolsas con un palo (al ser muy urticantes, hay que tener mucho cuidado). Esto hay que hacerlo los días más frescos y al atardecer, de esta manera si alguna se ha escapado no le dará tiempo a rehacer el bolsón y morirá de frio durante la noche. C) Eliminar las orugas cuando bajen del árbol. Se puede colocar un plástico duro pegado al perímetro del tronco a modo de embudo y se llena de agua, de este modo cuando las orugas bajen del árbol en procesión para enterrarse en el suelo se ahogarán. D) Buscar las zonas de anidación de las orugas cuando están en terradas en el jardín, se suele observar un montículo de arena removida y sobre elevado del terreno de unos 15-25 cm. de diámetro aproximado. Desenterrar y matar a las orugas.

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