Otra reflexión necesaria.

NO EXISTEN SANOS, SÓLO ENFERMOS QUE SE IGNORAN.

Las últimas muertes producidas en España por que los enfermos de hepatitis C no pudieron tener acceso al nuevo tratamiento de pastillas, me hizo plantear nuevamente la cruda realidad: también para combatir la enfermedad se hace necesario tener dinero.

No todos los días, se descubren medicamentos que curan el virus en casi el 100% de los pacientes. Es lo que ha ocurrido con la hepatitis C, un contagio que portan unas 900.000 personas en España, que representa la principal causa de cirrosis y cáncer de hígado y que es responsable de la mitad de los 1.000 trasplantes hepáticos que realiza el sistema sanitario español al año. Una familia de nuevos fármacos, ya aprobados, se ha convertido en el primer paso hacia la erradicación de la hepatitis C. Esa es la buena noticia; la mala: su precio. El tratamiento con sofosbuvir, el primero farmaco que llega a Europa, cuesta casi 60.000 euros. La “aspirina” en un principio se utiliza para paliar los dolores de cabeza, ahora los anuncios ya nos dejan ver que también sana los dolores musculares y las agujetas, antes atenuadas con agua con azúcar, pero no sólo son anuncios los que nos dejan ver pastillitas que sanarán todos nuestros males.

Así es como Knock, ver http://elcirculodelagora.blogspot.com.es/2016/03/,el-sano-un-enfermo-que-se-ignora.htmlse, enriquece a base de crear enfermos, que acuden a sus consultas ante el más mínimo imprevisto, igual ocurre cuando las enfermedades no causan el suficiente temor, ya se encargan de hacer que temblemos, la gripe aviar, que ha matado a menos de un 2% que la gripe normal, pero…No hay peligro de que los enfermos disminuyan, la imaginación da para crear nuevos síndromes: el síndrome postvacacional, la narcolepsia, el trastorno del sueño por turnos de noche, la hiperactividad…Así pues luchar contra un gigante, en pleno siglo XXI en donde los diez primeros laboratorios farmacéuticos financiaron con diez millones de dólares las campañas electorales, es difícil, pero se oyen voces disonantes ante ellos. Cuando hay muchos medicamentos que en el mercado alcanza los 50 euros tiene un coste de 2 euros y de que el dinero restante no se destina a la investigación íntegramente.

Los beneficios de la producción farmacéutica asustan; Bayer Hispania con un gasto en investigación y desarrollo de 28 millones de euros tuvo un importe neto de cifra de ventas de 1.285.000.000 euros. Estas cifras descubren el gran negocio de los laboratorios farmacéuticos. En la actualidad vivimos en un estado de enfermedad permanente, es decir, no existen sanos, hago nuevamente referencia a http://elcirculodelagora.blogspot.com.es/2016/03/,el-sano-un-enfermo-que-se-ignora.htmlse, sino el que aún no se le ha detectado ninguna enfermedad o patología.

Cuando el negocio se antepone al beneficio de la sociedad se cometen atrocidades en las investigaciones y se atrasan al no querer compartir resultados, deja de ser importante la salud para primar la patente, pues al fin y al cabo es la enfermedad o la supuesta enfermedad lo que enriquece a unos pocos. Sin embargo vivimos en una sociedad de consumo que nos hace impulsivos a la hora de comprar, que no nos permite pensar si aquello por lo que pagamos es realmente útil. Plantearse una lucha contra un fin establecido es difícil, no veo sencillo como luchar contra el pánico que nos inculcan desde que nacemos, ese pánico a la enfermedad, y por qué no decirlo a la muerte, que se soluciona con una pildorita milagrosa, mientras sigamos sin leer lo que realmente ocurre seguiremos teniendo miedo, no sólo a la enfermedad y al muerte si no también a la sociedad en la que vivimos, porque de ella y en ella nacen nuestros temores. Mientras la sociedad se base en una competencia, será difícil remediar los abusos que sufrimos.