Otra arbitrariedad en las llamadas telefónicas


LOS NÚMEROS 902 SE COBRAN APARTE
Un teléfono que se inicia con un 902 es un sucedáneo de otro número de teléfono normal que no cuesta. Se trata de un número, que una compañía ofrece a sus clientes para darles algún servicio y pueden tener asociados uno o varios números normales.
Llamar a esos números nos saldría gratis dentro de la tarifa plana, pero los 902 no. Hay que decir que las llamadas a los 902 pueden suponer hasta 12 o más euros. Depende de cómo se gestione esa llamada. Si se establece música de espera, si nos pasan con un ordenador que nos da cien opciones enumeradas y entrando en detalles, si nos leen la política de protección de datos antes de realizar la consulta, si nos dicen continuamente “espere, le paso” o “en este momento estamos ocupados, vuelva a marcar pasados unos minutos”……
En realidad después, la factura telefónica refleja un gasto grande debido a llamadas a números 902. En esta frase hay al menos un error, ya que decir gasto excesivo no es correcto. Más bien se refiere a que la mayoría de nosotros disfrutamos de tarifa plana en llamadas a fijos, pero LOS NÚMEROS 902 SE COBRAN APARTE. Además de facturarse fuera de la tarifa, uno llama a un 902 para resolver un problema con, la compañía de seguros o al odontólogo, notificar una avería o algo que realmente se necesita hacer. Ya que suelen ser números asociados a servicios de atención al cliente, y por tanto, ¿por qué debemos pagar por un servicio que nos debe dar gratis la empresa? Si pagamos por una garantía extendida, ¿cómo es posible que se nos cobre por una llamada que está relacionada con esa garantía?
Además el 902 lo elige la compañía, es un servicio adicional que nos quiere proporcionar a nosotros que, además, se corresponde con un número de teléfono normal que nosotros deberíamos poder elegir para llamar. Percibimos que estamos pagando por un servicio que no necesitamos para acceder a un servicio que sí necesitamos.
Es un abuso cuando quien responde la llamada nos entretiene, nos hace esperar escuchando una molesta melodía, nos lee un texto que no queremos escuchar… En ese caso nosotros percibimos que estamos pagando por un servicio que no necesitamos. Por no hablar de las veces que tenemos que colgar y reintentar la llamada por diferentes motivos. Entonces ya nos tiramos de los pelos.
Podemos evitar llamar a un número 902. Existen muchos servicios en internet como por ejemplo: http://www.nmn900.com/, http://nomas900.info/ que nos ofrecen la correspondencia entre el 902 y el número normal, que no es gratis, pero sí que está incluido en nuestra tarifa plana. Lo que debemos hacer es tomar nota de esos servicios y tenerlos bien a mano, http://www.nmn900.com/ http://nomas900.info/  y otros a la hora de realizar una llamada.
Las altas fraudulentas en luz y gas han quedado en segundo lugar entre las cinco nominadas a La Peor Práctica Empresarial del Año, con el 22% de los votos de los consumidores. Los comerciales de las compañías visitan a los consumidores a sus domicilios para ofertar descuentos que en realidad encarecen las facturas. Un enorme fraude en el que muchos usuarios también están siendo víctimas de altas no autorizadas mediante falsificaciones de contratos.


La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) emitió una recomendación para el ministerio de Industria, Energía y Turismo en la que pedía la prohibición del uso de los prefijos 902 en los servicios de atención al cliente de las empresas. El motivo es que los números que empiezan por este prefijo, así como por 901 y los 800, se contemplan por parte de las operadoras como números fuera de tarifa plana y por lo tanto con un coste adicional para el cliente que solicita el servicio.
 

Comentarios

  1. Precisamente, hace unos días tuve que llamar a la Mutua Madrileña Automovilista para recabar una información, necesite llamar tres veces a cerca de cinco minutos cada vez. Después de pasar por diferentes episodios explicativos, me decían que todos los servicios estaban ocupados y me mantuviera al espera con musiquita por medio.
    Yo contrate la Mutua como eso., una mutualidad a un costo elevado y además se tienen que abonar las comunicaciones

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    1. Andrés toma nota: Mutua Madrileña 902555550
      Teléfono: 902 555 550 – Equivalentes 915 578 200 / 915 922 500 / 915 578 204

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    2. Cada de cinco minutos a un 902 puede costar en torno a 0,5 euros si se llama desde un fijo pero más de 2,5 euros si se llama desde un móvil, dependiendo de la operadora.
      Son números de tarificación adicional, y su precio suele ser muy elevado, ya que una parte del beneficio es para la compañía telefónica y otra para la empresa que presta el servicio.
      Hay muchas empresas que los ofrecen y las tarifas de estos números no están reguladas, así que se puede encontrar muchos precios.
      La OCU advierte: si se es usuario habitual de estas guías hay que tener en cuenta “que algunas líneas cobran hasta 4 euros por minuto”.
      Además, muchos de ellos ofrecen la "progresión de llamada", de manera que se ofrecen a hacer la llamada por el usuario, de forma que siguen cobrando como si se estuviese hablando con el 118.

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  2. Pablo García Gomez15 de marzo de 2016, 14:11

    Llamar a un 902 sale más caro que hacerlo a cualquier otro número que contemple prefijos provinciales. Esta es una situación que se arrastra desde hace bastantes años y que ha generado no pocas polémicas. Ya en 2011 el gobierno de Rodríguez Zapatero preparaba una ley para regular el uso de estos prefijos por parte de las empresas que reciben quejas y consultas de sus clientes. Sin embargo, la llegada de elecciones anticipadas dejó la ley en suspenso.
    El objetivo de la ley era evitar que un usuario se viera espectacularmente gravado cuando, por ejemplo, sufría un cambio de vuelo por parte de una compañía aérea y quería gestionar por teléfono una solución que se adecuara a sus necesidades. Si la gestión telefónica se alargaba en exceso, podía darse el caso de que la llamada alcanzara costes de 40 o 50 euros, una penalización incomprensible cuando el cliente estaba ejerciendo su derecho de reclamar o informarse.
    Y lo mismo solía ocurrir cuando se trataba de aclarar un cobro injustificado de una mutua médica o la renovación de una tarjeta de crédito que se había deteriorado. De hecho, en más de una ocasión la justicia dio la razón a clientes que recurrieron los sobre costes de sus llamadas. Se daba, además, el agravante de que las empresas se lucraban a través del 902 con la atención al cliente, mientras que otra parte del beneficio iba a parar a la empresa que presta la atención telefónica, el llamado call center, que es quien pone los teleoperadores.

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