POLITICOS CORRUPTOS
¡QUE SE VAYAN TODOS!
“Los políticos aparecen como una rémora perjudicial para el bienestar de
los conciudadanos”
Basta
investigar a los medios de comunicación con un cierto espíritu crítico para
constatar una opinión condenatoria sobre toda una "clase" o
"casta" política
¡Que se
vayan todos¡ ha sido el grito resumido de este estado de ánimo. Esta
reprobación a muchos políticos municipales arrastra fácilmente a una condena
general de la política.
Se debe castigar a los responsables del presente austericidio que beneficia sólo al capitalismo |
Si la
política es "lo que hacen los políticos", es inevitable concebirla
cómo el reino del engaño, la corrupción
y la pugna egoísta por las ganancias particulares de quienes están en ella. Muy
lejos, por tanto, de concebirla como el espacio donde se trabaja por el bien
común y entender la política como un servicio. La ciudadanía ve una dinámica
institucional muy profesionalizada que monopoliza una parte del poder
alejándose de la idea que la política es
un servicio para servirse opíparamente de su manejo cuando se permanece en
el poder el tiempo suficiente para corromperse fácilmente.
Una
necesidad compartida por una buena parte de los ciudadanos es el cómo
identificar con precisión al político responsable de su crisis y cuál deberían
ser castigado. Tampoco está claro que las alternativas políticas que ofrecen
los partidos con opciones de gobernar sean diferentes y que un cambio de color
en el ejecutivo pueda suponer un cambio sustancial en el tipo de
vida.
La crisis
económica se inició en 2008 con el colapso de Lehman Brothers, provocado un
aumento de la insatisfacción política. Algunos ciudadanos somos más escépticos
con el funcionamiento de la democracia, sobre todo cuando el desempleo aumenta
actuando como un predictor preciso de la desconfianza política y que la sanción
electoral no ha ayudado a renovar la confianza en las instituciones
democráticas en donde la profunda crisis económica ha calado hondo en el
espíritu de la ciudadanía. Obligando a muchas personas, especialmente jóvenes,
a tomar partido activo de la vida política y comenzar a manifestarse en la
calle exigiendo responsabilidades para los políticos que hicieron de la
política y del poder institucional una manera de enriquecimiento ruin que ha
contribuido a la crisis económica que padecemos ahora. Estos políticos deben
darse cuenta que han de abandonar la vida pública a la espera que el poder
judicial pueda realizar su trabajo, depurando responsabilidades para ofrecer a
la ciudadanía la satisfacción que está exigiendo en la calle y en todos los
medios independientes de información.
Los
ciudadanos perciben el déficit democrático sobre todo en temas de política
económica, y son conscientes de la falta de instrumentos para castigar a los
políticos responsables. Por exponerlo de otra manera, ¿cómo se castiga a los
responsables del austericidio? La falta de mecanismos efectivos de castigo y
recompensa resulta en frustración colectiva y en la pérdida de confianza en el
sistema político.
Nuestro objetivo debiera poner en contacto a una serie de personas que comparten, a través de Internet y de las redes sociales, esa necesidad de CRÍTICAR el estado actual de la democracia española, contribuyendo a crear un estado de opinión que mueva a los ciudadanos a exigir de los dirigentes políticos ciertas REFORMAS.
ResponderEliminarLos ciudadanos pretendemos que la clase privilegiada de nuestro pueblo, es decir, los políticos, nos escuche y tome en consideración nuestras propuestas. Sabemos lo que viene, sabemos lo que debe hacerse, estamos dispuestos a compartir los sacrificios, pero no aceptaremos que seamos los ciudadanos anónimos, los sin voz, los únicos que carguemos con el peso de las dolorosas medidas que es necesario tomar. No tenemos demasiado claro que alguien nos escuche, no tenemos demasiada certeza de que alguna de nuestras propuestas sea implementada, no creemos, honradamente, que los políticos acepten asumir también los sacrificios a los que nos obligan a los ciudadanos, pero, al menos podremos decir a nuestros hijos, a nuestros amigos, a nuestros conciudadanos que algo hicimos, que lo intentamos, que tratamos de hacer oír nuestra voz, que tratamos de hacer llegar nuestro mensaje a sus destinatarios.
Por desgracia las redes sociales llegan a menos de un 20% de la población. No sé muy bien cómo solucionar este problema que, exceptuando a personas mayores, demuestra a veces una falta de interés de los votantes hacia sus candidatos. Hay recursos más que suficientes para quien quiera informarse...
EliminarLa democracia basada en el voto cada 4 años. Una vez elegidos, pueden hacer todo lo contrario de lo que postularon en su campaña electoral, como el pacto entre Pivalde y PP. El fraude está servido. Luego para más inri, empiezan a legislar leyes nuevas, que impiden que los ciudadanos protesten. Legislan para ser imposible detener a los corruptos, legislan para que no ingresen en las cárceles. Esta democracia tal y como se lleva en España, esta con un cáncer terminal por metástasis generalizada. Hay que llevarlos a todos a las cárceles.
EliminarCONVERTIR LA POLÍTICA EN UN MODUS VIVENDI VITALICIO
ResponderEliminarComo lo que pretende Pilar López Partida, entreabre una puerta al corporativismo, la rutina o la corrupción de mayor o menor cuantía. Pero cuesta atribuir el desencanto masivo sobre la política a una reacción irritada cuando se dan prácticas condenables. Unos centenares de corruptos o aprovechados no bastan para explicar la tacha que se lanza sin matices y sin datos sobre 150.000 cargos electos y 2.500.000 de empleados públicos.
Nuestro secretario municipal y algunos funcionarios municipales están contribuyendo con su aportación a generar posturas irregulares en el consistorio.
La dimisión de los ciudadanos. Los ciudadanos de los países más desarrollados tienden a dimitir de sus responsabilidades colectivas. Están sometidos a la presión publicitaria que promueve un estilo de vida donde el bienestar personal pasa por delante de cualquier otro objetivo. La disposición a la cooperación para fines comunes disminuye. Si apenas se admiten los sacrificios y privaciones que exige la búsqueda de la prosperidad individual, mucho menos aceptables aparecen las renuncias y las privaciones que reclama la entrega desinteresada al bien público. Ocuparse de los asuntos comunes o comprometerse en su gestión representa una merma del tiempo y de la energía que requieren las obligaciones familiares, las tareas profesionales o las aficiones recreativas.
Querido Profesor González,
ResponderEliminarDebe usted saber que una dificultad compartida por los ciudadanos del Sur de Europa es la de cómo identificar con precisión qué políticos son responsables de la crisis económica y cuáles de ellos deberían ser castigados.
Tampoco está claro que las alternativas políticas que ofrecen los grandes partidos con opciones de gobernar sean diferentes y que un cambio de color en el ejecutivo pueda suponer un cambio sustancial, especialmente en materia económica.
La principal consecuencia de que las elecciones no estén cumpliendo con su papel de legitimación de la democracia es que la frustración de los ciudadanos se está proyectando de manera indiscriminada hacia todas las instituciones políticas clave, en especial el gobierno, el parlamento y los partidos políticos.
Desde Alemania mi afecto Profesor.
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EliminarCreo que la culpabilidad de la actual corrupción y desafección general ante las instituciones reside en la "política profesional". Vivimos sujetos a los intereses de aquellos que han convertido el poder en una forma de vida, olvidándonos de aquellos profesionales, cada cual en su sector, que además de tener una perspectiva real de la situación, quiere aportarla a la sociedad.
ResponderEliminarLa implicación del ciudadano en este sentido debería superar el desánimo que no nos lleva a ninguna parte.
Considero interesante analizar las cuestiones que plantea el artículo del profesor, pero en este caso creo que lo hace desde un punto de vista muy restringido. Reduce el mecanismo de premio/castigo a las consultas electorales.
ResponderEliminarEsto tiene un fondo ideológico preocupante (el viejo discurso de que la democracia reside, básicamente, en los mecanismos de elección de representantes), pero sin entrar en ese tipo de argumentos, creo que cualquier análisis que intente medir la insatisfacción con la democracia y las respuestas de la ciudadanía (que ahí estarían los premios y castigos) tiene que incluir toda la variada tipología de acciones políticas (manifestaciones, grupos y colectivos emergentes -o que desaparecen-, mecanismos de acción directa,...). Esto es, en primera instancia, una decisión metodológica pero que, como toda decisión metodológica, tiene su origen en consideraciones epistemológicas (y con eso volvemos a las decisiones ideológicas).
Se pueden realizar análisis sociales con las herramientas que al poder le interesan o con otras diferentes. Cualquier opción es legítima, pero es bueno conocer la diferencia.
Caciques transformados, engañadores compulsivos, sinvergüenzas, incultos, ladinos y secretos vengadores, nadan confortablemente en cualquier sistema político pero prefieren, exigen, el suyo, azuzadores del odio, los hijos como nostalgia y melancolía, pornógrafos ocultos
ResponderEliminarsomos los regeneradores de lo que hemos des regenerado, nos perdonamos a nosotros mismos, el paro nos es ajeno, nos castiga menos porque somos mejores, prometemos lo que sea menester, debajo de los cubiletes no hay dado, la gran violencia en la reserva por si fuera necesaria que Dios no lo quiera, la del día a día es de juguete con sus porras y sus pelotas de goma en aras de la seguridad, para que no se rebelen, ¿pero qué se han creído?, ¡con lo que hacemos por ellos, o eso les decimos y se lo creen!, la pobreza y la desigualdad mejor no mirarlas, ignorarlas, ¡qué manía con la desigualdad!, más no podemos hacer, mítines y más mítines, el BOE a nuestro servicio como una ametralladora, y las televisiones y los demás medios, para que no vengan los zascandiles, adanes y bisagritas, críticos y equivocados comentaristas, amateurs de la política, de la que solo nosotros somos genuinos representantes porque el pueblo, domeñado, lo quiere. Nosotros somos gentes de orden, no como ellos que quieren destruirnos.
ESTA CONDENA A LOS POLÍTICOS ARRASTRA FÁCILMENTE A UNA CRÍTICA GENERAL DE LA POLÍTICA. SI LA POLÍTICA ES "LO QUE HACEN LOS POLÍTICOS", ES INEVITABLE CONCEBIRLA COMO EL REINO DEL ENGAÑO.
ResponderEliminarLa corrupción y la pugna egoísta por las ganancias particulares de quienes están en ella. Muy lejos, por tanto, de concebirla como el espacio donde se trabaja por el bien común. Hay que preguntarse por las razones de una opinión tan extendida. ¿Es una reacción fundada? ¿Cuáles son sus motivos? Con ayuda de bibliografía antigua y reciente, resumo algunas explicaciones.
La ciudadanía se aleja cada vez más de una dinámica institucional muy profesionalizada que monopolizan cada uno a su modo político de dedicación exclusiva COMO LA ALCALDESA Y SU SEQUITO Y A LA PERIODISTA QUE LES SIGUEN COMO SU SOMBRA y que pagamos entre todos sin habernos preguntado jamás y no nos informa de nada mas que aquello que interesa a la alcaldesa. Constituyen un círculo cuasi autónomo, en el que comparten reglas no escritas, escenarios públicos, latiguillos retóricos y otras complicidades.
Precisamente esas entre otras son las respuestas que debe exigir el ciudadano responsable a la hora de decidir su voto ¿Cuánto me cuesta su gestión? y ¿para que intereses gobernara?
EliminarLa periodista que acompaña a la alcaldesa está cumpliendo con su trabajo y si se sale un ápice es despedida. No es precisamente un trabajo grato y considero que ella también se sentirá muchas veces incomoda.
Respecto a la idea que planteas sobre dedicación exclusiva: particularmente lo tengo claro porque los políticos de un municipio deben confiar en el funcionariado para la gestión y ellos dedicarse únicamente a dirigir la política, que para nada necesita de dedicación exclusiva. Precisamente ahí se encuentra la clave del interés político en muchos pueblos, lo cual supone una sangría para el ciudadano que paga todo, todo “barra libre”
Democracia. Demo-Cracia. Poder del Pueblo. El pueblo de Valdemorillo vota cada cuatro años, de manera democrática, y elige la mayoría de ese conjunto de votantes, ciudadanos de Valdemorillo. La mayoría son corruptos, por eso eligen a políticos corruptos. Este asunto está muy trillado. El concepto de democracia es muy antiguo y está más que acreditado que es totalmente ineficiente. No comparto la demo-cracia. No me gusta la demo-cracia. El ejemplo lo tenemos en este pueblo. Si fuese un buen sistema político no habría tanta queja. Tarde o temprano la democracia será sustituida por otro sistema político. Estoy hastiado de la tiranía de la mayoría. Que regrese la aristocracia y nos irá mejor. Nos ahorramos elecciones patéticas cada cuatro años, etc. Regresemos a una sociedad donde los impuestos sean indirectos, pasemos del concepto de redistribución de la renta, lo único que genera son vagos y maleantes, etc. El Estado del Bienestar, un concepto erróneo, la democracia, sustento de ese sistema corrupto del que nos quejamos en este blog. Con la aristocracia nos irá mucho mejor a todos. Se acabará la tiranía del proletariado y de su patética mayoría. Aristo-Cracia. Desde Atenas, siempre que la sociedad ha tenido graves problemas socioeconómicos, en mayor o menor medida, la democracia se ha limitado. Roma Imperial, etc. Sirva de referente la etapa de la Weimarer Republik, de no ser por la ARISTOCRACIA, nunca habrían conseguido ser el faro de la EU en la actualidad. Señores, menos democracia en Valdemorillo. La democracia es el caldo de cultivo de la tirania de la mayoría y, en el caso de Valdemorillo, de la tirania de los tontos de remate, que SOMOS mayoría.
ResponderEliminarRESPETO SIN COMPARTIR SU PUNTO DE VISTA.
EliminarOrtega mucho menos recio y firme en sus ideas y convicciones de lo que se creía, un intelectual que de tanto en tanto experimenta crisis profundas de desánimo que paralizan esa energía que, en otras épocas, parece inagotable, y lo lleva a escribir, estudiar y meditar sin tregua, durante semanas y meses, produciendo artículos, ensayos, una correspondencia ingente, dando clases y conferencias y desarrollando al mismo tiempo una labor editorial que dejaba una huella importante en la cultura de su tiempo.
Ortega también planteaba semejante contradicción intelectual con respecto al verdadero sentido de la democracia como menos mala de los regímenes. Puedo decir que he vivido en la dictadura de una aristocracia sin pensamiento Unamuniano y me quedo con el actual régimen. Aconsejo lee mi último artículo Del Circulo del Agora.
Ok, lo haré
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